Varios son los motivos por los que están afuera. Los más jóvenes no piensan regresar, los más viejos ya no lo harán. Todos envían dinero a sus familias
Hemos estado obsesionados por aquello que no existe. Hemos despreciado las claves que nos entrega el presente. Hemos antepuesto el futuro como consuelo
"La conciencia y la inteligencia, características de las que tanto nos vanagloriamos, son albures de una supuesta condición de superioridad que en realidad no poseemos"
"No sabemos lo que habrá de ser, el argumento más sólido es que hace cuatro meses nadie esperaba que tendría que guardarse en casa a causa de un mal planetario"
Tal vez no haya mejor momento para un cambio social en Colombia que la ruptura de los hábitos de vida a los que estábamos acostumbrados. Pero, ¿estamos listos para innovar?
