En medio de la cuarentena con los pasillos del aeropuerto vacíos, un funcionario graba lo que parece una actividad paranormal en los baños de las instalaciones
Desde las casas de tortura de paramilitares en La Gabarra hasta bosques suicidas en Japón, son lugares donde los fantasmas, el miedo y el dolor siguen vivos.
Un hotel de suicidas en el Salto de Tequedama, la casa de torturas de los paramilitares en La Gabarra, una sede nazi en Cúcuta, lugares donde los fantasmas, el miedo y el dolor siguen vivos.