Hace 2 años, recién elegido senador, fue llamado a indagatoria por la Corte, junto a sus dos abogados renunció a su curul para defenderse. Después reculó.
Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia no definen aún la suerte jurídica del expresidente pero sus seguidores han amenazado con tomar medidas extremas
Como “no hay mal que por bien no venga”, es posible que quienes metieron preso al gobernador queriendo hacerle daño terminen exaltándolo a un liderazgo nacional que nadie esperaba