Para empezar, no cabe la palaba “secuestro”, pues la presencia de la periodista o fue voluntaria y pactada, o fue inesperada y vista por quienes la retuvieron como una situación que requería controlarse
Mientras Bashar Al Assad, intenta desactivar la posible intervención bélica norteamericana, Siria sigue encendida por la violencia. Catalina Gomez nos cuenta qué es lo que está pasando.