¿Qué clase de sociedad es esta que, en medio del confinamiento, sin verse cara a cara ni socializar, ve los mal llamados “homicidios colectivos”, las masacres, sin inmutarse, con un liderazgo de vergüenza?
En los alrededores de la fiesta nacional del 20 de julio, el país vive una situación de calamidad pública sin precedentes por cuenta del coronavirus. ¿Qué hacer?
¿Será que el aislamiento preventivo obligatorio puede causar alguna alteración funcional neurológica, transitoria o de mayor envergadura, como la causada por el hambre?
Sin lugar a dudas, el confinamiento ha traído infinidad de desafíos, no solo a nivel personal sino colectivo. El sector educativo no ha estado exento. Una perspectiva
Seis casos que he vivido como médico general esta cuarentena, sin relación con el covid-19 pero sí ligados con el confinamiento, el encierro y el miedo