La alcaldesa de Bogotá satanizó a quienes viajaron durante el simulacro de cuarentena y ha impuesto su voluntad por vanidad y necesidad de mostrar liderazgo
En un momento donde el gobierno debe preocuparse por los ciudadanos, el presidente toma una actitud egoísta y desconoce los esfuerzos de alcaldes y gobernadores