En Bogotá son más de cien los que pierden la batalla, todos terminan incinerados en uno de los seis crematorios distritales donde incineran 60 cadáveres al día
A la entrada del cementerio, como en el Serafín de Bogotá, los parientes acompañan el recorrido que termina en un horno crematorio. Más de seis mil colombianos lo han vivido
Sin la compañía de sus familiares los difuntos tienen que ser cremados. En Bogotá los cadáveres llegan al Cementerio Serafín, donde son puestos uno a uno en las puertas del horno