Como la única bonanza grande de este país duró cuatro años, tenemos que preguntar por cincuenta mil millones de dólares que le quedaron al gobierno ¿Dónde están?
¿Después de despilfarrar la bonanza petrolera e hipotecar el futuro, con qué vamos a pagar un endeudamiento de 180 billones de pesos? Dios nos tenga de su mano con la reforma tributaria