A pesar de los señalamientos por sus excesos y de tener encima la justicia por el Fifagate Putin lo invitó por los favores recibidos para asegurarle a Rusia la sede del mundial
Al primero que pillaron fue a Chuck Blazer, quien confesó los US $50 millones que recibió en sobornos, y luego, con un llavero-balón grabó para el FBI a sus colegas directivos