La suspención del crédito de 370 millones de dólares, provocó la alegría de la gran mayoría de ciudadanos que creían un despropósito salvar a una aerolínea extranjera
Además de los despidos que han empezado a anunciarse discretamente ya se siente el deterioro de condiciones que formaban parte de los contratos laborales
“Quiero iniciar esta carta por expresarle, con toda claridad, que no estoy de acuerdo con que se tomen 370 millones de dólares de los dineros públicos para entregárselos a Avianca a ningún título”
El cuantioso préstamo a la aerolínea y la propuesta de privatizar un porcentaje de la participación estatal en la empresa petrolera no dan buenos indicios sobre lo que viene