María Fernanda Moreno y Marcela Peláez -una politóloga y periodista, la otra literata-, son las mujeres de carne y hueso detrás de Susana y Elvira. En el 2008 crearon un blog para compartir anécdotas cotidianas con un grupo de amigos de redes sociales. Lo que inició como un pasatiempo no remunerado, se convirtió en una marca de estilo de vida que hoy reúne un blog, una serie web, un comercial de champú y dos libros.
Empezaron con un blog color rosa, que representaba la figura de mujer tradicional que se pinta las uñas, tiene una mejor amiga y posiciona las relaciones de pareja sobre la realización profesional. Susana y Elvira, es un elogio a la mujer normal, que llora porque se siente gorda y se deprime menos por perder su empleo.
Luego del blog, que se convirtió en una especie de consultorio sexo-amoroso-amigable, con consejos de parte de dos mujeres normales que no son especialistas en la vida y sus trastornos, nació una serie web, que ha alcanzado 4 temporadas con capítulos entre diez y quince minutos. Desde ese entonces, las chicas que revolucionaban la web tuvieron un rostro público, encarnado en las actrices Manuela González y Mabel Moreno, que hicieron las veces de Susana y Elvira, respectivamente. Los capítulos van de Rodolfo foreva –Rodolfo es el vibrador y mejor amigo de Susana- a Te estoy empezando a querer, con más consejos de cosas – como no pedir en la primera cita platos que sean difíciles de comer-, muletillas gomelas tras cada frase, gritos ante unas botas nuevas, gritos ante un mensaje de texto del chico que les gusta o gritos ante un soplo del viento. Fueron capaces de reunir todos los gestos desesperantes de las mujeres, en una sola serie.
(Capítulo de la serie) Susana y Elvira, La Serie. Capitulo 8: "Te estoy empezando a querer"
Luego vino el comercial de champú. Las chicas del blog rosa, repleto de clichés femeninos, saltaron de la web a la televisión nacional y extendieron su público, a las amas de casa que ven comerciales mientras esperan la novela mexicana de las tardes.
El anonimato se detuvo cuando la idea se hizo atractiva para una de las más importantes editoriales del país, que vio en el par de treintañeras un tiraje superior a 1000 ejemplares, que imprimen los autores promedio en el país. El libro empezó a ocupar un espacio en la mesa de noche de las mujeres entre 18 y 35 años, justo al lado de la trilogía de 50 Sobras de Grey, y demandó varias reimpresiones. Consejos viscerales para casos reales (e-book) y Lo entendimos todo mal (impreso), son los libros y dicen, básicamente, lo mismo.
Hoy son un fenómeno en redes sociales, con más de 100.000 seguidores y 38.000 suscriptores en youtube, con clubes de fans y decenas de interacciones diarias, que van de saludos de admiración a fotografías de los ejemplares de Lo entendimos todo mal, recién desempacados por las lectoras.
Consultamos los criterios de publicación de un libro, al editor de una de las casas editoriales más importantes del país y entre las posibles características, se encuentra, que el autor sea un personaje mediático con un público específico. Claramente ese fue el requisito que cumplieron ellas, que no tuvieron que someter su producción a más que una breve edición, diferente a los escritores de literatura colombiana que se queman las pestañas durante años, para terminar con 500 ejemplares impresos por una editorial independiente. Otros criterios son la coyuntura del tema, como publicar un libro sobre los Diálogos de paz en este momento; o la calidad de la obra, como empezó a hacerse con escritores como Tomás González, que no eran muy reconocidos en el país, pero nunca se puso en duda la calidad de sus novelas y cuentos. Algunos escritores reúnen varios criterios. No muchos en Colombia.
También les preguntamos a los coordinadores de la FilBo, las características al momento de elegir a los invitados especiales al evento. Sabemos que es un poco de calidad, otro poco de experiencia y en grandes dosis: autores que vendan libros. Ellas venden.
María Fernanda y Marcela, es decir, Susana y Elvira, se presentarán el sábado 25 de abril a las 4:30 p.m. en la sala Álvaro Mutis de Corferias, en un evento que sin lugar a dudas, venderá muchas entradas.