Si una entidad territorial (municipio, departamento o distrito) tiene un crecimiento constante de sus ingresos tributarios y un índice de desempeño fiscal sostenible, ello supondría una posibilidad mayor de generar satisfacción de necesidades insatisfechas a través de la acción pública. En términos prácticos, implica mayor inversión social y obras físicas necesarias (colegios, hospitales, vías, parques, seguridad alimentaria y nutricional, y varios ejemplos más).
Ahora bien, para poder cumplir con las necesidades insatisfechas ya tenemos la primera parte de la ecuación resuelta, que es tener los recursos disponibles, la otra parte de la ecuación es saber invertir o ejecutar. Para ello es indispensable contar con gobernantes con visión, que busquen el interés general mejorando la calidad de vida con equidad.
Iniciando su primer período como alcalde, Alex Char decidió enfrentar una de las batallas jurídicas y administrativas más importante del momento para recuperar gran parte de los recursos tributarios que terminaban en manos de particulares por cuenta de las concesiones. Fue así como en el 2008 acabó con el contrato de Métodos y Sistemas, entre otros. Posterior a esta importante decisión, debía conformar un equipo de profesionales idóneos para el manejo de las finanzas públicas del distrito a través de la Secretaria de Hacienda y decidió acertadamente vincular a Elsa Noguera como secretaria de Hacienda y a Fidel Castaño, como director de impuestos.
Tres administraciones han cumplido con sus respectivos períodos y está en curso la cuarta administración, la del alcalde Jaime Pumarejo. Los trece años que han pasado desde aquella decisión de transformar las finanzas públicas de Barranquilla por parte de Alex Char ubican a nuestra ciudad como la mejor en el recaudo de impuestos. Para la muestra un botón, analizando las cifras de recaudo tributario del primer trimestre del año 2021 con las mismas del 2020, Barranquilla presenta resultados superiores a ciudades como Medellín y Bogotá.
La que más creció en el recaudo de ingresos tributarios entre Medellín, Bogotá y Barranquilla fue nuestra ciudad. La que más creció porcentualmente en el recaudo del impuesto predial fue nuevamente Barranquilla, supera a Medellín y Bogotá. Por último, con respecto al recaudo del impuesto de industria y comercio, a pesar de la pandemia, Barranquilla ocupa el primer lugar en alcanzar el mayor porcentaje de cumplimiento de lo presupuestado y segundo lugar después de Medellín en cuanto a crecimiento del recaudo (fuente: Chip-Fut).
La innovación del alcalde Char fue detectar que para resolver los problemas sociales y de infraestructura que tenía Barranquilla era importante transformar los rasgos culturales en comportamientos, actitudes y hábitos. Manejó un discurso que afirmaba que no era suficiente con generar cambios en las instituciones, y evocó la cultura ciudadana o cultura de pago. Era indispensable que el contribuyente empezara a concientizarse y sobre todo a ser parte de todos los programas que brindaba la alcaldía, la cual buscaba afianzar la información y aclarar todas aquellas dudas que tenían los contribuyentes acerca del pago de los tributos y la destinación que se le daría a estos ingresos tributarios.
A Alex Char hay que reconocerle que fue un gobernante con mucha visión, quien, sin duda alguna, se la jugó por políticas fiscales sostenibles a largo plazo para ubicar a Barranquilla en el plano nacional como pionera en el recaudo de tributos. Así como toda luz tiene su sombra y toda administración pública tiene sus detractores, tendrán que conformarse con sopa y seco con sabor fiscal porque esta también la perdieron.