Cuando me observo en mis acciones lo primero que pienso es en qué mundo vivimos los seres humanos. Qué responsabilidad le cabe a cada individuo que como ente en este planeta tiene que vivir con solo cinco sentidos que en el transcurrir de su desarrollo en su entorno tiene que tomar decisiones que no solo lo afectan a él sino a su entorno.
Medioambiente, medio social y medio teológico o medio agnóstico. Si bien se habla de libertad esta no podrá ser real a menos que el conocimiento sea primero que los logros que tienes.
En nuestro mundo parece que los logros es lo que se promociona. Cuando te dan la oportunidad ser útil y formar tu carácter. La comodidad y la ambición son prioridad en la vida de muchos. Es por ello que nunca voy a opinar sobre lo que otros hacen ya que todos en nuestra conciencia sabemos cuándo somos sinceros con nosotros mismos y por ello con los demás cuando mientes estas invitando a otros a mentir de ahí que el concepto engaño comienza con el auto-engaño que es un vehículo que se sabe dónde comienza, pero no sabes a dónde te llevara.
A muchos se les da una posición de poder que utilizan para determinar el cómo, cuándo y dónde de la calidad de vida de otros y en su egoísmo, acompañado de ignorancia toman decisiones, hablan de cómo son las cosas, pero no hablan de qué han hecho para que esas mismas cosas sean acuerdo a la necesidad de la calidad de vida y la del mundo que quieren tener.
Hay un proverbio alemán que dice: “Muy pocos de nosotros saben lo mucho que hay que saber para saber lo poco que sabemos…”
Qué comunican tus acciones, no tus palabras, esa es la diferencia entre la libertad y las dependencias en la vida de un ser humano.