Como estaba previsto, Alberto Núñez Feijóo sufrió su primera derrota en su intento por ser el próximo presidente del gobierno español.
Con 178 votos en contra y 172 a favor, el líder de la oposición no alcanzó los 176 sufragios necesarios para ser investido. Solo contó con los apoyos de Vox, de Unión del Pueblo Navarro (UPN) y de Coalición Canaria (CC).
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que encabeza el presidente del actual Gobierno, Pedro Sánchez, y la bancada aliada de izquierda Sumar votaron en contra, así como EH Bildu, el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y el Bloque Nacionalista Galego (BNG).
Ante este resultado, los parlamentarios fueron convocados a una nueva votación en 48 horas, el próximo viernes 30 de octubre, cuando Feijóo deberá obtener la mayoría simple.
En esos comicios, el PP obtuvo el primer lugar, pero ningún partido logró la mayoría necesaria, al menos 176 escaños, para formar gobierno. Las alianzas políticas son cruciales en este escenario.
¿Qué procederá si fracasa la segunda votación de investidura de Feijóo?
En el previsible caso de que Feijóo vuelva a experimentar una derrota en la votación del viernes de esta semana, empezará a correr el tiempo para que se presente un nuevo aspirante a la investidura: Pedro Sánchez.
Entonces, probablemente sin pérdida de tiempo, Felipe VI tendrá que establecer una nueva ronda de contactos con los movimientos políticos para confirmar el siguiente nominado a la votación de investidura.
Para ello, Sánchez deberá sostener al jefe de Estado que cuenta con los sufragios necesarios para ser reelegido en el cargo. Entonces se establecerá una fecha para esa sesión, posiblemente en octubre.
En caso de que ni Feijóo ni Sánchez superen las votaciones de investidura, los españoles volverán a las urnas. El Legislativo tendrá que confirmar un presidente de gobierno antes del 27 de noviembre o, de lo contrario, se disolverían las cortes y el país sería convocado a nuevas elecciones generales, para el 14 de enero de 2024.
¿La razón de ese calendario? El reloj ya ha empezado a correr, ya que el artículo 99 de la Constitución española establece que tras la primera votación fallida, ocurrida este miércoles 27 de septiembre, se abre un plazo de dos meses en los que, si ningún candidato ha logrado ser investido, se disuelven las cortes y se llama a nuevos comicios en un plazo de 47 días.
El independentismo, con la llave para el próximo gobierno
Sánchez se aferra a sus posibilidades de repetir gobierno. Tras semanas de negociaciones entre su bancada política y los partidos independentistas catalanes, el líder del PSOE contaría con el respaldo necesario.
Sin embargo, depende de los votos de los políticos separatistas y en el centro de sus exigencias están tanto la amnistía para los líderes que llevaron a cabo el referendo de independencia de Cataluña en 2017, no autorizado por Madrid, como una nueva consulta popular sobre la autodeterminación de esa comunidad autónoma.
Se trata de asuntos sensibles en el país que causan amplia división y se han convertido en temas clave de las discusiones para formar el próximo gobierno.
Justamente, en este espinoso tema Feijóo enfocó sus discursos ante el Legislativo en las dos sesiones de debate para su investidura, el martes y este miércoles. El político gallego remarcó que, a diferencia de Sánchez, él no cede a las presiones de los independentistas, que califica como "chantajes".
“Quien calla otorga, señor Sánchez, y veremos la intensidad de su silencio y la intensidad de lo que le otorga y lo que le exige, lo que no podemos saber nunca es si lo que usted les va a dar será suficiente o no, pero eso no lo decidirá usted”, aseveró el líder del PP, al recordar que el presidente del Gobierno optó por no dar ninguna réplica un día antes al discurso del dirigente opositor.
“El señor Sánchez no ha querido salir a la tribuna porque no podía defender ayer lo que defendió hace dos meses delante de todos los españoles", dijo Feijóo, en referencia a las promesas del líder socialista que en campaña repitió que no cedería a las pretensiones de los separatistas.
Por ahora, el líder del PSOE no ha revelado qué entregaría a cambio de su investidura. Políticos independentistas y la prensa local dan por hecho que cedería: primero, amnistía y después, un posible referendo sobre la independencia de Cataluña.El eurodiputado y expresidente de la Generalitat,
En las últimas horas, el Ministerio del Interior pidió a Europol que elimine el vínculo entre el independentismo catalán y el terrorismo de su informe sobre 'Situación y tendencias del terrorismo en la Unión Europea (TESAT 2023)'.
Se trata precisamente de una de las quejas que recientemente expuso Carles Puigdemont, líder de Junts per Catalunya y expresidente de la Generalitat, en un discurso, el pasado 5 de septiembre, mientras se refería a las exigencias para apoyar la investidura de Sánchez.
En las últimas semanas, el jefe del Gobierno ha enfocado sus declaraciones en asuntos sociales como el aumento de sueldos y pensiones, pero no ha mencionado el tema del independentismo.
Mientras el futuro político del país se mantiene en el limbo, Sánchez guarda silencio y Feijóo pone el foco en contra del independentismo y eleva su rol de líder opositor.