El plan de eliminar a Guacho, que empezó en abril pasado, después del asesinato los tres periodistas ecuatorianos, tomó ocho meses. Las operaciones conjuntas de las Fuerzas militares que centraron 12 mil uniformados en el área de Tumaco, se centraran en Gentil Duarte, el excomandante de las Farc que encabeza la disidencia más importante de las Farc en el agraviare y quien tenía articulación con Guacho y provee de cocaina a la del mafia brasileña.
En el otro frente de ataque esta después Dairo Antonio Usuga David, alias Otoniel, líder del Clan del Golfo, por el que se ofrece una recompensa en Colombia de $3.000 millones y en Estados Unidos de USD 5 millones. Aunque desde principios del 2018 Otoniel anunció su sometimiento a la justicia, no ha cumplido y sigue manejando un gran cartel narcotraficante y delincuencial. Ahora se encuentra acorralado, enfermo acompañado sólo de 60 hombres en algún lugar del Pacífico colombiano. El otro objetivo de las autoridades es Gentil.