La más reciente ficha movida por el presidente dentro del remezón presidencial ha sido la ministra de Vivienda y Agua, Catalina Velasco, abanderada de los proyectos de agua en La Guajira. El mandatario solicitó su renuncia la noche del lunes, siendo la quinta titular de cartera en dejar su cargo.
Velasco había representado soluciones efectivas de agua para el departamento de La Guajira, en medio del escándalo de corrupción propiciado por los altos cargos de la UNGRD, representados en la onerosa compra de 40 carrotanques que poco han aportado para mitigar la histórica problemática del agua potable.
En sociedad con el Plan de Aguas de La Guajira, la ministra ha sido la única ficha mostrar en el actual gobierno, ha inaugurado casi que una planta de tratamiento de líquido mensual y ha rehabilitado multiples pozos de agua . Incluso, alrededor de las obras, se han establecido parques infantiles.algo insólito en ese territorio.
Es bien sabido que el gobierno debe dar cumplimiento a la sentencia T-302 de 2017, con la que la Corte Constitucional protege excepcionalmente a las comunidades vulnerables del departamento ante la ausencia de alimentación, agua potable y salud
En este tiempo, la ministra Velasco supo mantener prudente distancia de actores políticos que han buscado aprovechar políticamente la situación de vulnerabilidad. Por ejemplo, soportó estoicamente la incomodidad de la senadora Martha Peralta, que alcanzó a declarar "el agua la tienen secuestrada".
Para más referencia, la misma frase fue usada por el defenestrado director de la Unidad de Riesgo, Olmedo López, quien se encuentra junto con su subdirector, Sneyder Pinilla, a la espera de un principio de acuerdo que les permita negociar su testimonio y su eventual pena ante la justicia.
Velasco será reemplazada por la arquitecta Helga María Rivas, quien fue designada el pasado mes de febrero como directora general encargada de la UNGRD.
Por lo pronto, en La Guajira, todos se preguntan si el agua volverá a llegar en lo que queda del actual gobierno nacional.