En medio de las críticas y de los detractores que ha tenido Ser Pilo Paga (SPP), el cual otorga diez mil créditos-beca a estudiantes de bajos recursos con excelentes puntajes en las Pruebas Saber 11°, los mejores defensores del programa hemos sido los ‘pilos’, demostrando con buenos resultados ante Colombia y Latinoamérica que SPP funciona.
A pesar de la desigualdad en este país, las ganas de salir adelante no se opacan y cada año se mantienen las esperanzas para miles de estudiantes jóvenes y adultos cuyos recursos no son suficientes para empezar una carrera profesional, y en muchos de los casos estudiar en grandes universidades como las que hoy ofrece SPP es solo un sueño utópico.
Mucho se ha dicho de Ser Pilo Paga, han publicado artículos sobre lo malo que tiene, e incluso han propuesto acabarlo. Quizás el programa no sea perfecto, pero nos ha dado a miles de estudiantes la oportunidad de pasar el umbral del sueño utópico que teníamos para convertirlo en realidad. Los ‘pilos’ hemos demostrado que el programa da resultados: en las universidades nuestro índice de deserción ha sido muy bajo, mantenemos promedios sobresalientes, actualmente lideramos y hacemos parte de grupos académicos, de investigación e incluso somos representantes estudiantiles en Sociedad Pilo.
Cada joven o adulto que alcanza un crédito-beca como estos, está logrando transformar su vida y a la vez la de su familia, su comunidad y su país. Esto nos dice que el programa SPP debe seguir independientemente de la persona que esté en la Casa de Nariño. Es el momento de avanzar hacia una sociedad más educada y hacia un país con mayores y mejores oportunidades.
Las universidades públicas no han sido abandonadas, puesto que a través del CREE (Impuesto sobre la renta para la equidad) en los próximos años recibirán $3 billones de pesos para financiar su infraestructura física, tecnológica, bibliográfica y sus proyectos de investigación.
Si hablamos de dinero, un artículo de El Tiempo revela que un día de guerra en Colombia cuesta alrededor de 22.000 millones de pesos y no se obtiene más que sangre y dolor. Los invito a comparar las cifras del costo de la guerra con lo que invierte el MEN al año en SPP con educación de alta calidad.
Ser Pilo Paga ha servido para que los estudiantes que antes no tenían esperanzas de llegar a una gran universidad se demuestren a sí mismos que pueden lograrlo y que no deberán preocuparse por gastos, sino, por terminar su carrera.
En Colombia se pensaba que estudiar en universidades de prestigio era un “lujo” que solo se podían dar las élites, sin embargo, hoy los 'pilos' estamos en ellas.
A continuación presento una lista de diez razones por las cuales Ser Pilo Paga debe seguir:
- Se benefician estudiantes talentosos.
- El programa ha logrado disminuir brechas sociales.
- Se ha demostrado que los jóvenes de escasos recursos que quieren estudiar en una gran universidad, con esfuerzo pueden lograrlo.
- Hoy los 'pilos' somos personas que pensamos en la transformación del país.
- Los resultados en las Pruebas Saber 11 han mejorado significativamente.
- Las escuelas oficiales de las cuales provenimos la mayoría de los 'pilos' están dando cada vez mejores promociones.
- Los recursos no se están desperdiciando: se están invirtiendo.
- Las clases sociales con menos oportunidades han sido las más favorecidas.
- Se le da a los potenciales beneficiarios la oportunidad de elegir libremente la carrera y la universidad.
- En las universidades los 'pilos' somos estudiantes sobresalientes con bajos índices de deserción.
Diez razones son pocas frente a las cientos que hay, y más si van acompañadas de las historias de vida que tenemos cada uno de los estudiantes (aunque para muchos críticos no sean relevantes).
Los colombianos debemos aprender a ver lo bueno de manera objetiva. SPP ha dado los resultados que cualquier otro programa quisiera obtener.
*Estudiante, Universidad Tecnológica de Bolívar
Vocero de Sociedad Pilo UTB.