Según unos datos revelados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se mostró que las enfermedades mentales como la ansiedad y la depresión han aumentado fuertemente en los últimos años, en un 15% y 18% respectivamente. Las personas cada vez más se ven afectadas por las circunstancias, las situaciones del día a día y se les va pasando la vida, dejando de ser un privilegio a ser una carga. La pregunta no es por qué estamos así, más bien es cómo haremos para cambiar eso.
¿Qué hace falta para salir de un mal momento?, ¿nuestra vida pierde significado con una mala experiencia?, ¿por qué vivir para estar frustrado, no debería ser al contrario?
Para muchos cada día es un milagro, una experiencia nueva por vivir a través de un mundo lleno de misterios e incertidumbres. Para otros cada día es un deber, viven el día y no son conscientes de todo lo que tienen, o más bien, no ven lo que es relevante, algo que es invisible en un mundo rutinario. Está claro que la vida es una serie de acontecimientos, pero somos nosotros los que les damos el poder a ellos. Cualquier situación es neutra, es nuestra representación acerca de ella la que nos la hará ver positiva o negativa. Sin embargo, en muchas ocasiones le damos mucha importancia a los negativos.
El influyente orador, Anthony Robbins, expuso: “La clave de la vida es ser capaz de sentirse bien cuando uno no se siente bien o incluso cuando uno no quiere sentirse bien”. Tenemos que ir más allá de lo malo, más allá de lo obvio, tenemos que redefinir las circunstancias para que pasemos a ser creadores y creativos de nuestra vida. El novelista americano Bruce Barton dijo una vez: “Jamás se ha conseguido nada espléndido que no sea por personas que se atrevieron a creerse superiores a las circunstancias”. Al igual, el principio 90/10 pone en evidencia que todo es cuestión de actitud y cada situación varía según la perspectiva escogida. Las circunstancias no son más que un amplificador de quiénes somos.
¿Por qué no atreverse a hacer de una experiencia incómoda y negativa el mejor impulso para alcanzar esos sueños que alguna vez creímos utópicos?, ¿por qué no creer en nuestro poder interior y vivir al máximo cada día?
Esta es una invitación para no dejarse derrumbar por una dura situación o por un momento difícil. Cada persona vive en su mundo, cada persona siempre tiene problemas, se queja de algo y siempre está insatisfecha. Hasta que no seamos conscientes de dónde enfocamos nuestra energía, no podremos cambiar nuestra vida. Broonie Ware, una experta en cuidados paliativos, escribió en su libro: “ El principal arrepentimiento de mucha gente es ‘ojalá hubiera tenido el coraje de hacer lo que realmente quería hacer y no lo que los otros esperaban que hiciera”. ¿ Y si tu vida fuera un libro, lo leerías? Atrévete a vivir la vida que algún día soñaste, a ver más allá de lo imposible y haz de cada momento el momento ideal. Al fin y al cabo, nuestros minutos están contados y no vinimos a este mundo para rellenarlo.