A los 23 años, cuando atacó en el Mount Ventoux y puso a temblar al super corredor Chris Froome, creíamos que Nairo Quintana sería el primer colombiano en ganar un Tour de Francia. Cuando un año después ganó un Giro pensamos que estábamos frente a uno de los mejores ciclistas de la historia. Pero las expectativas de Nairo no se han cumplido. Lleva dos años en franca decadencia. Ser 12 y 10 en los dos últimos Tours suena a muy poquito. Su equipo está tan desilusionado de él que contrató a Mikel Landa, un ciclista del montón, un hombre que apenas ha hecho un podio en una gran vuelta, para reemplazarlo.
Landa se accidentó hace un mes y no alcanzó a recuperarse. Nairo contó con suerte y aprovechó para ser el único líder de su equipo. El cartel no podía ser mejor para el boyacense: ni Froome, ni Geraint Thomas, ni Doumolin, ni los mejores ciclistas del mundo estarían en el evento. Además sus rivales más peligrosos, Richie Porte y Vicenzo Nibali venían tocados por lesiones y enfermedades. Ayer, después del pinchazo que tuvo Wilderman y el bajonazo de Pinot, Nairo tiene como sus más peligrosos contendientes a los colombianos Urán y Supermán Lopez o los segundones Enric Mas o Fabio Aru. Un corredor con la trayectoria y características de Nairo debería ganar la Vuelta con Otitis, como le ganó el Giro del 2014 a Urán.
Las cosas van bien. Está octavo a 1:14 minutos y ha estado atento, vivo, para no dejarse sorprender en los últimos kilómetros de estas etapas onduladas y peligrosas, tan propicias a las emboscadas, etapas que le pudieron haber costado la vuelta a pedalistas como Pinot. Si me apuran podríamos decir que todo el podio colombiano. Ojalá tenga piernas. En la primera llegada en alto decepcionó. Se limitó a chupar rueda, una actitud que el periodismo europeo le ha reprochado, una actitud que muchos le achacan a Unzue quien siempre ha sido un técnico conservador.
Ojalá volvamos a encontrarnos con la mejor versión de Nairo Quintana. ¿Se acuerdan cuando era el mejor escalador del mundo y era capaz de dejar votado incluso a Chris Froome? Necesitamos que regrese y nos vuelva a llenar de alegría. Si Nairo no gana esta Vuelta saldrá del Movistar y ya nadie volverá a confiar en él. Es duro decirlo y hasta malagradecido pero es verdad. Nairo está ante su última oportunidad.