Más de cien niños y niñas reciben clases fuera de sus colegios en un lugar improvisado, y esto debido a un conflicto acerca de tenencia de tierras con el pueblo indígena Nasa del resguardo La Laguna. Instituciones del Gobierno Nacional y organizaciones internacionales poco han servido para solucionar esta problemática.
Luis Felipe Morales, Gobernador indígena del cabildo de Ovejas, explicó que ya se han realizado las denuncias contra el gobernador Nasa del resguardo La Laguna y sus dirigentes, luego de que invadieran los predios y desplazaran a sus habitantes: “Ellos invadieron propiedad privada de nuestro cabildo que fue comprada gracias al convenio AICO Misak del año 2005. El resguardo que pensamos constituir en Ovejas está retirado del resguardo La Laguna, no es cierto que lo vamos a hacer dentro del resguardo Nasa, ni hoy ni nunca. Nosotros no necesitamos un favor, es un derecho ganado ancestral y legalmente”.
Heriberto Tunubalá, gobernador misak del resguardo indígena de Guambía, municipio de Silvia, manifestó que no ven garantías en la mesa de negociación que facilita el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) entre los dos pueblos indígenas y el Gobierno: “Ellos van a dilatar y eso es a lo que nos han llevado. Los mismos funcionarios del Ministerio del Interior, Defensoría del Pueblo, Gobernación e incluso organizaciones como la OEA [Organización de Estados Americanos] y la ONU [Organización de Naciones Unidas] también llevan ese ritmo”.
Frente a semejante situación las acciones legales contra la Alcaldía de Caldono y la Gobernación del Cauca no se descartan pero los misak son conscientes del tiempo que perderán con el sistema de justicia ordinario, y que las familias desplazadas no pueden esperar: “Son 104 niños que no están asistiendo a clase, por eso pensamos tomar la vía Panamericana, viajar con los desplazados a la ciudad de Bogotá y tomarnos la Plaza Bolívar”, sentenció Tunubalá.
El pasado jueves el coordinador general de educación de Guambía, junto a instituciones del Gobierno Nacional y la ONU realizaron una comisión de observación a la Escuela de Formación Misak Siberia para verificar si había condiciones y que los niños y niñas misak retornaran a sus clases. No se pudo desarrollar este trabajo pues una autoridad Nasa que allí se encontraba dijo: “Que quede claro que no hay condiciones porque está ocupado el colegio no porque se encuentra destruido”. Un recorrido, fotografías y videos fueron negados por los indígenas Nasa.
El representante de la Gobernación manifestó: “Yo le hago extensiva a la Secretaría de Educación de la decisión, y simplemente les seguiremos acompañando, ustedes saben que para eso estamos”. Por su parte la Defensoría del Pueblo indicó que “el único que podían pronunciarse, lógicamente, es la Defensoría del Pueblo frente a esta visita. Estamos dispuestos para acompañar cualquier espacio de mediación y generaremos un informe”. La representante de la ONU aclaró que estaba allí para una visita no para una verificación y “como están las condiciones nos retiramos de la comisión”.
Claramente una situación de tensión ocurre entre estos dos pueblos indígenas del Cauca, las 70 familias no son reconocidas como población desplazada y por ello no tienen ayuda desde las instituciones públicas; los indígenas Nasa acusan que son víctimas de montajes y que piden al Gobierno una reubicación del cabildo misak; y la intervención del Gobierno de Iván Duque no va más allá de invitaciones para dialogar.