Bajo la presión combinada de su vicepresidenta, Cristina Kirchner, quien también es la principal dirigente política del peronismo, y de los gobernadores de esta fuerza política, el presidente Alberto Fernández le otorgó finalmente a Sergio Massa un “súper ministerio” de Economía este jueves 28 de julio.
Massa, hasta ahora presidente de la Cámara de Diputados, fue el tercer hombre de la coalición que ganó las elecciones de 2019, acercando a Fernández y Kirchner su electorado de la provincia de Buenos Aires, estimado en un 20% del total nacional.
Hoy en día, aporta al gobierno su figura política y sus buenos contactos en Estados Unidos, en un momento en que la Argentina vuelve a tambalear.
Controlando Producción y la Agricultura, reducidos al rango de secretarías de Estado, así como los Impuestos y la Aduana, y con la mirada puesta en Hacienda y el Banco Central, Massa espera poder poner orden en una economía azotada por una inflación del 70 % anual y que debe cumplir con un ajuste acordado con el Fondo Monetario Internacional.
Su liderazgo será importante, pero deberá imponerlo en una situación inédita, con un presidente muy debilitado y una vicepresidenta cuya principal preocupación es escapar de los procesos judiciales en su contra por corrupción.
Nuevas protestas en Buenos Aires
Miles de argentinos volvieron a protestar el jueves en Buenos Aires para exigir medidas sociales de emergencia ante la inflación. 10 millones de argentinos viven en la pobreza. El gobierno prometió el martes otorgar un bono de 11.000 pesos, es decir unos 30 euros, a los beneficiarios de programas sociales. “No es suficiente porque sólo abarca a 1,2 millones de personas, y no al conjunto de la población que vive por debajo de los niveles de pobreza teniendo un trabajo formal", dice a RFI el activista Lucas Stevani, manifestante en la Plaza de Mayo de Buenos Aires.
Las organizaciones sociales y sindicales descartan por ahora una ruptura total con el gobierno, pero anuncian que habrá una nueva movilización el 7 de agosto. Oscar de Isasi, secretario general del segundo sindicato del país, envió en la protesta una advertencia al presidente Fernández: “¡Que no tenga duda que le vamos a llenar las plazas si rumbea para el lado del ajuste!”
