Estaba leyendo sobre el caso de David Montoya y quiero darles a conocer mi historia.
Nací en la hermosa cuidad de Villavicencio y al igual que David fui una beneficiaria de Ser Pilo Paga. Con esfuerzo y apoyo de mi familia hoy en día vivo en Bogotá y entré a una de las mejores universidades del país como lo es la Universidad Javeriana. Por mi gusto por las matemáticas y la física decidí estudiar una ingeniería, pero cuando iba en segundo semestre empecé a chocar contra todo, en esto incluyo materias y notas. Cuando empecé a sacar notas de 1, no dejaba de pensar que cometía un error.
Hoy me encuentro en sexto semestre de esta carrera y no tuve la fuerza para tomar esta decisión en segundo semestre como él. Todo este año (2017) he sufrido cada día al levantarme para ir a la universidad, de hecho, rompía en llanto cada vez que llegaba a una clase y chocaba día a día con la realidad de que simplemente lo que estaba haciendo no era para mi. Sin embargo, por miedo a todo lo que esto conlleva no quería dejar "tan grandiosa oportunidad".
El día de hoy me encuentro haciendo el proceso de abandono de carrera y terminación de esta "beca" que engaña cada día a más colombianos de pocos recursos. No puedo hacer el cambio de carrera, ya que esto esta permitido hasta cuarto semestre. Ahora, con tan solo 18 años de edad, tengo encima una deuda de aproximadamente 75 millones de pesos.
Aún tengo ganas de salir adelante y estudiar algo que realmente me guste, en realidad, lo que siempre tuve en mente. Solo espero que los colombianos se den cuenta y no sigan cometiendo el mismo error solo por sus ganas de salir adelante. Para cerrar digo que ser pilo no paga, que solo destruye, o al menos eso fue lo que hizo conmigo. En estos momentos, se me destruye la vida, me ahogo con la presión, decepción y el miedo que me consume.