El Centro Democrático sancionó disciplinariamente a Paulina Aguinaga, Lina García, Nataly Vélez y Albert Corredor, cuatro de los ocho concejales que tiene en Medellín por desobedecer y no votar por el candidato del uribismo, Simón Molina, para la presidencia del Concejo. A último minuto, los concejales se voltearon dándole la mayoría al alcalde, pero tras la sanción impuesta por la directora del CD, Nubia Stella Martínez, se quedaron sin voz y voto en el Concejo y ya Daniel Quintero empieza a sentir las consecuencias.
En la noche del 23 de noviembre, con seis votos a favor y seis votos en contra, hundieron en el Concejo el presupuesto de inversión de Medellín para el 2022. Eta es la primera vez en la historia de la ciudad que no le aprueban a un alcalde el presupuesto general. Se deberá realizar otra votación debido al empate, pero Quintero anunció que apelará a la Comisión Tercera para salvar la inversión del año 2022.
A este desalentador panorama para Quintero, se suma el viaje de incognito de Quintero a Miami en compañía de su secretario de Gobierno, Juan Esteban Restrepo. La solicitud que presentó al Concejo era únicamente para un viaje a la exposición Smart City en Barcelona en el que se le desembolsaron viáticos por 25 millones de pesos. Sin embargo, Quintero terminó en Miami, en la celebración de la inauguración de la tienda del ciclista Rigoberto Urán en la que se presentó el cantante Carlos Vives. Jaime Roberto Cuartas, presidente del Concejo de Medellín, entregó la documentación a la Procuraduría para que le abra una investigación al alcalde.
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