El seleccionador nacional de ruta, Carlos Mario Jaramillo, ha expuesto la nómina de pedalistas en la categoría masculina élite, y ha dejado más dudas que certezas en cuanto a su conformación y objetivos en tan importante prueba. Colombia, al ser la segunda potencia mundial de esta disciplina, tiene derecho a un cupo de 9 ciclistas. De hecho, nuestro país está en el mismo escalón con Gran Bretaña, Italia, Bélgica y España para la cita a disputarse en Bergen (Noruega) en octubre próximo.
Las dudas nacen de la conformación del equipo, ya que la prueba está diseñada para verdaderos clasicomanos y de una gran entrega o trabajo en equipo para dar consecución al logro de un podio, que “a priori” sería un resultado ideal para nuestro “Dream team” criollo. La nómina la conformarían, según el informe del seleccionador, escaladores natos, con poco fondo en esta parte de la temporada, cansancio acumulado por los kilómetros recorridos, y sobre todo muchos de ellos nunca han llevado el overol de gregarios que en esta jornada sería fundamental.
El recorrido de la prueba de fondo enfrentará a lo más selecto del ciclismo mundial a 277 kilómetros de recorrido con un terreno llano inicial de cerca de 41 km para terminar con un circuito de 12 circunvalaciones. El terreno, en general, será poco llano, muchas curvas y una cota de 1,5 km con 6,8% de media de desnivel, a 10,5 km de meta, que lo convierten en un recorrido técnico, muy seguramente acelerado a un alto promedio de velocidad donde se debe seleccionar un equipo de estas características, y no como ha sucedido en este caso, un equipo plagado de estrellas, donde hay mucho cacique y poco indio, donde seguramente tendremos mucho respeto en la línea de salida, pero pocas opciones reales de finalizar con alguna presea en la bolsa.
La nómina la integran:
RIGOBERTO URÁN: el toro de Urrao, con experiencia en clásicas, y con el fondo suficiente, además de su experiencia olímpica en Londres 2012 donde se llevó la medalla de plata, y de su excelente nivel de temporada, es indiscutible, sumado a que sería la primera opción como “capo” del conjunto tricolor, ya que tiene la punta de velocidad, excelente ubicación y estrategia.
FERNANDO GAVIRIA: el misil de la Ceja, sin duda alguna, es nuestra gran promesa, y también sería una gran opción en la disputa de los escalones en el pódium. Tiene el fondo en bagaje internacional, pero en contra tiene que no es el mejor si de superar “repechos” se trata. Sin emargo, de conseguirlo, que solo es posible con un equipo de nivel, sí sería una perfecta opción. No olvidemos que cursa un período de receso por una cirugía y no conocemos el tanque con el que llegue a Noruega.
NAIRO QUINTANA: el cóndor de Boyacá no la pasó bien en el Tour de Francia, pero es un corredor con sed de triunfo, a pesar de que tiene en sus piernas el infernal ritmo del World Tour. No sabemos si estaría dispuesto a montarse el overol y luchar en pro de un objetivo con otro nombre como lo es el de Urán o Gaviria, más cuando se sentencia que no es un recorrido que le favorezca. Habrá que esperar si el de Cómbita decide hacer parte de la cita mundial como último objetivo de la temporada.
SERGIO LUIS HENAO: el antioqueño, pieza clave de la locomotora SKY, y actual campeón nacional de ruta llegaría a la cita mundial con buen tren en sus piernas. Ya tiene la experiencia de estar al frente con los mejores, y hoy candidatos al título, como lo son VAN AVERMAET, O KIATKWOSKY, con quien disputó los últimos juegos olímpicos y una caída evito la recompensa. Además, podría ser una de las fichas en una fuga que pueda prosperar y llegar a la disputa del título final.
ESTEBAN CHAVES: el bogotano tiene una excelente condición en este tipo de pruebas por la resistencia, pero no tiene las mejores facultades como corredor potente para poder efectuar una labor de gregario, más por las características del terreno en pro del eventual líder del equipo. Además, viene de un Tour para el olvido y recuperándose de una tendinitis.
JARLINSON PANTANO: el vallecaucano, gregario de lujo de Contador, un hombre que sabe lo que es desfondarse en la bicicleta en pro de triunfos de otros, es una pieza indestronable de nuestra banda nacional. Además, es uno de los mejores en el descenso, es buena punta de velocidad y tiene buena ubicación en los sprints. Él, sin duda, dará una mano grande al capo escuadra de nuestra nómina y seguramente será uno de los mayores tanques, si de fondo hablamos en la nómina.
MIGUEL ÁNGEL LÓPEZ: Superman llega a una temporada en la que la expectativa radicará en su desempeño en la Vuelta a España, la cual será su estreno en una grande. Este pedalista ávido de triunfo y explosivo en los finales, puede tener el fondo, pero en su contra está su capacidad técnica, escasa para este tipo de terrenos, a pesar de que enfundarse el traje de gregario no le sería ajeno en esta oportunidad de disputar un campeonato del mundo.
CARLOS BETANCOURT: después de unos años para el olvido, el paisa pasa por unas de sus mejores temporadas, siendo gregario de lujo para Quintana el tour y top 20 al final. Él es un hombre de galones, al que le viene bien este tipo de recorridos. Cabe anotar que el bananito ya había sido subcampeón del mundo sub 23. Además, sabe qué es estar en una fuga y posiblemente llegue bien después de la Vuelta a España. Tal vez sea él el que tenga las mejores características para este tipo de pruebas.
SEBASTIÁN HENAO: el antioqueño al servicio del team SKY aún es una promesa para nuestro ciclismo. Sin embargo, no es un corredor precisamente explosivo o de gran rendimiento en el llano. Para esta prueba se requiere más potencia, y sobre todo que aguante y llegue al final. Él no es un corredor que dispute, realmente, y por su actual temporada es que fue discutida su inclusión en la nómina.
CARLOS MARIO JARAMILLO: le ha apostado a un equipo de quilates, de nombres particulares, pero que poco puede aportar a un objetivo final. Parece más una estrategia publicitaria que una nómina realmente conformada. De lejos no es el equipo para Gaviria ni Urán. En este seleccionado faltan unos 3 hombre pasistas que protejan bien a un líder, controlen ataques y puedan poner un ritmo en un momento definitivo de la competencia. Ya sucedió en la cita del año anterior, donde solo 2 corredores terminaron la prueba y la segunda potencia pasó sin pena ni gloria por tal certamen.
Si somos los mejores, debemos demostrarlo. No debemos simplemente cumplir, debemos ser sobresalientes, porque tenemos nombres para disputar como Gaviria. Sin embargo, sin un equipo adecuadamente formado, este sueño está lejos de ser una realidad.