Todo motociclo, ciclomotores y los moped, vehículos de cilindraje no superior a cincuenta centímetros cúbicos, que son los vehículos que usan los domiciliarios de plataformas como Rappi, ya no podrán usar las rutas por las que prefieren desplazarse. Así que se terminó la fiesta para ellos, acabó, por ejemplo, su desplazamiento los domingos por la ciclovía o por cualquier ciclorruta de la capital. Esto es por el riesgo que tienen estos vehículos a la hora de colicionar con un runner, o algún ciclista que en ese momento quiera ejercitarse.
Otro de los argumentos de la alcaldía es la contaminación que generan estos vehículos. Los que no acaten esta medida sus vehículos serán multados o inmovilizados. Las multas estarán entre 522.900 y 1.045.500.
En Las 2 orillas, horas después de que se tomara la medida, sacamos el micrófono a la calle y le preguntamos a la gente qué opinaba sobre esto. Hay muchas familias que se verán afectadas porque tienen como único sustento sus monomotores para desplazarse llevando sus domicilios. Pero otra parte de la población está feliz ya que considera que es lo único correcto que podría hacer la alcaldesa Claudia López debido a la contaminación y, sobre todo, a los continuos accidentes generados por estos vehículos
