En la Corte Suprema de Justicia, Francisco Ricaurte, José Leónidas Bustos y Gustavo Malo utilizaron su poder para amañar decisiones judiciales y archivar investigaciones que afectaban a 26 políticos entre ellos gobernadores y alcaldes que acudían a los magistrados a cambio de jugosos pagos. La justicia fue llegando y duro contra el Cartel de la Toga; Ricaurte -ex presidente de la Corte Suprema de Justicia- fue condenado a 19 años de prisión sin posibilidad a solicitar el beneficio de casa por cárcel mientras que Gustavo Malo permanece detenido a la espera de su juicio.
El único que logró evadir la justicia fue Leónidas Bustos, quien además era el más influyente en todos los aparatos judiciales y el cerebro de esta máquina de corrupción. El ibaguereño terminó huyendo del país el 28 de noviembre de 2018 rumbo a Canadá en donde recibió la acusación por los delitos de concierto para delinquir y tráfico de influencias.
Desde hace tres años, Bustos permanece en libertad. En enero de 2021, reapareció en el juicio virtual contra Francisco Ricaurte, una vez más Bustos negó cualquier vínculo con el exmagistrado o el señalado Cartel de la Toga. En abril de 2020, la Comisión Excelencia en la Justicia (CEJ) solicitó que se emitiera circular roja para Bustos. Sin embargo, no fue posible concretarla, ahora que el Senado dio vía libre para que la Corte Suprema de Justicia lo investigue se podrá solicitar la circular roja de la Interpol para la captura e inmediata extradición de Bustos para que responda ante la justicia colombiana.
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