El 5 de julio de 2021, dos días antes de que hombres armados entraran a su casa en la madrugada y lo asesinaran, Jovenel Moïse presentó al neurocirujano Ariel Henry como el nuevo primer ministro del país. Pero en esos dos días Henry no alcanzó a posesionarse en el cargo y por eso el 7 de julio fue Claude Joseph, primer ministro en funciones, quien se encargó de dar al mundo la noticia del magnicidio.
Joseph, quien también había sido canciller en el Gobierno de Moïse, renunció este lunes a su cargo y un día después, este 20 de julio, Ariel Henry juró como primer ministro de Haití. El nombramiento llega luego de que la ONU, Estados Unidos y Francia abogaran por respetar el designio de Moïse y efectuar la transición.
Con el Parlamento clausurado desde enero de 2020 y sin planes para buscar un sucesor de Moïse, Ariel Henry se proyecta como el hombre que gobernará al país en medio de la profunda crisis económica, política y social que lo atraviesa y hasta las próximas elecciones.
En su discurso de investidura, Henry aseguró que su Gobierno, integrado por 18 ministros, es un gabinete "de consenso" e "inclusivo". El Gobierno que presenta incluye a líderes de la oposición, representantes de la sociedad civil y personas con experiencia técnica.
Sin embargo, en las carteras más importantes, como Justicia, Economía o Exteriores, se mantienen sus actuales titulares, en este último caso, el hasta ahora primer ministro Joseph.
Esta circunstancia, sumada al apoyo internacional a Henry, ha alimentado los recelos de la oposición hacia el nuevo Gobierno. Incluso ya se han formulado llamados a protestas por parte de algunas fuerzas de izquierda.
En la entrega de poder, Joseph advirtió las tareas que le esperan a su sucesor. "Usted hereda una situación excepcional caracterizada por la ausencia de un presidente que le sirva como escudo, una crisis política sin precedentes en la historia del país, inseguridad galopante, una situación económica morosa y precaria", resaltó Joseph.
La ceremonia coincidió con el inicio de las honras fúnebres a Moïse
La investidura del nuevo Ejecutivo se solapó con el comienzo de las honras fúnebres para el presidente asesinado. Jovenel Moïse será sepultado el próximo viernes en su panteón familiar, en la ciudad de Cap-Haitien, en el norte del país.
Aunque la ceremonia tendrá carácter de Estado, la viuda Martine Moïse, quien regresó al país durante el fin de semana tras ser tratada en un hospital de Miami, decidió que los gastos corran por cuenta de la familia.
Hasta ahora por el crimen están detenidos los 18 exmilitares colombianos. También están bajo custodia el jefe de seguridad de Moïse, algunos oficiales de la Policía haitiana y un par de haitiano-estadounidenses. Se sospecha que estos podrían estar involucrados en la conspiración para asesinar al presidente.
Este martes, durante su posesión, Henry afirmó que los responsables deberían enfrentar un castigo "ejemplar". "Todos los sospechosos de ser autores materiales o intelectuales deben ser identificados y llevados ante la Justicia. Nunca más tendremos que experimentar una tragedia así", sentenció el nuevo primer ministro.
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