Hubo una época en donde la televisión era algo muy grande, era lo más importante, lo único que había. Entonces habían series como El gallo de oro, con un monstruo como Frank Ramírez, recién llegado de los Estados Unidos y la diva Amparo Grisales, adaptación del guion de Juan Rulfo, o Los cuervos, la gótica historia creada por Julio Jiménez y dirigida con rigor por Humar.
Qué versatil era el gran Alí. También estaba el humor por supuesto. Él dirigió la última gran etapa de Sabados Felices y tenía anécdotas tan sabrosas como esta: Un día estaba en el bar del hotel Tequendama. Alí Humar estaba acompañado de varios productores de televisión y pidió un trago de Chivas 18 años. Después de hacer el pedido pidió permiso y se fue al baño. En el camino escuchó esta conversación en el bar "sea acabó el 18 años, echémosle el de 12...total, ¿Quién se va a dar cuenta?" Ali regresó a la mesa, esperó al mesero, recibió el trago, lo probó y con una mueca de asco lo rechazó "esto es un 12 años" el mesero, aterrado, le pidió disculpas y el hotel, ante semejante sibarita, se rindió a sus pies y le regaló una botella entera de Chivas Reagal 12 años.
Ali ya se había vacunado dos veces y aún así no pudo resistir las complicaciones del COVID. Murió a los 76 años en la Clínica Santa Fe. Su familia lo avisó en este comunicado:
