La disputa en primera vuelta tiene dos figuras preponderantes innegablemente: Petro y Rodolfo. Fico es un inflado por un electorado en permanente picada y deserción.
Razones: si bien no podemos medir el capital del electorado de Rodolfo (pues no participó en ninguna coalición) queda bien claro que la prensa de los establecimientos ha tratado de desconocer a los que no participaron de coaliciones y han pretendido configurar la “competencia” entre Petro y Fico.
¿Es esto del todo cierto? Por sí solo Federico hubiera alcanzado escasamente una votación igual o inferior a la de Fajardo. No hubiera superado al Char que sí puso a funcionar una potente maquinaria con la que dobló en firmas a Fico (2.5 millones) pero que lo “faltonió” el 13 de marzo, es decir, esa platica se perdió.
Entonces, ¿por qué no ganó Char? Sencillamente porque a Fico el rescoldo del uribismo le puso los votos.
Pronóstico:
Si el pueblo que llena las plazas hace lo mismo que en 2018, es decir, no sale a votar como debiera ser, Petro les ganará a todos, pero no le alcanzaría para ganar en primera vuelta.
Fico alcanzó su techo el 13 de marzo (aunque lo niegue). Los votos obtenidos del uribismo son la encuesta uribista. Si le restamos los de Fico por sí mismo, el caudal uribista es mucho menor. Esto nos dice que Uri-Duque en relación al 2018, perdió más de 8 millones de votantes.
La pregunta aquí es ¿para dónde migraron? Obviamente si Uri-Duque son culpables de la deserción, no irán a parar a Uri-Fico. Luego, Fico subirá obviamente porque la votación para presidente es tradicionalmente mayor, pero porcentualmente no será mucho.
La sorpresa puede ser Rodolfo. Puede ser, eso depende de la ciudadanía porque este no tiene maquinarias ni alianzas. Repito, no podemos medir su capital electoral en encuestas de medios allegados al establecimiento y los gremios porque están forzando la opinión pública a polarizarse en dos extremos.
El ingeniero podría pasar a segunda vuelta con Petro. Esto, si en este corto tiempo logra convencer a quienes no quieren ni a Petro ni a Uribe. Probablemente no le alcanzaría para ganar en segunda vuelta a Petro, pero, obtendría un escaño muy importante para el 2026.
Caída la vuelta el 13 de marzo, las próximas elecciones van a tener mayores controles en razón de lo mismo.