Vi la programación y supe que no había mucho por ver. A excepción de Panteón Rococó y Los Tres yo no conocía a nadie. Igual era gratis, aunque a Bogotá le sale muy caro porque esto lo pagan los contribuyentes. Estuve en el 2015 para ver el cierre de Café Tacvba y ahora regresé porque a mis 26 años nunca había visto en vivo a uno de mis ídolos: Robi Draco Rosa. Cumplía 20 años su álbum Vagabundo, de lejos el mejor de su carrera. Viajé por tierra, subiéndome al auto de quien quisiera llevarme. La travesía empezó el jueves y llegué el sábado. Me ubiqué frente a la tarima donde se iba a presentar Robi desde el mediodía y de ahí no me moví. En Cúcuta nunca va nadie decente. Hace un mes se presentó Vilma Palma e Vampiros, esos fracasados y, la verdad me parecía ridícula la expectativa que había entre la gente. Eso parecía Green Day.
Así que llegué temprano, me aguanté con estoicismo el humo de la bareta ya que no fumo y detesto su olor. Vi a Panteón Rococó y me parecieron buenos e igual a Los Tres. A las nueve saltó a la escena mi ídolo y empezó la decepción. Me molestó que buena parte del concierto el rockero le estuviera dando la espalda al público más preocupado de los problemas técnicos que el ingeniero de sonido nunca supo resolver que por ver a las fans que, como yo, nos morimos por su música. En varias ocasiones se paraba para hablar con alguien, supongo yo que era el máster, para ver si el sonido mejoraba. Después de la tercera canción supe que era verdad todo eso que decían de mi Robi: el hombre estaba acabado. Para colmo de males el concierto apenas duró una hora. Qué decepción.
Rock al parque desde hace unos años solo está viviendo del cuento. Hoy veo que la administración saca pecho porque fueron 180 mil espectadores al puente y que no hubo peleas ni rencillas. Rock al parque es el festival gratuito más importante de Latinoamérica pero si no se pone las pilas va a naufragar. Todo empezó mal desde que el señor Julio Correal decidió excluir a rockeros por su manera de pensar. Para el próximo año deberían hacer buenas convocatorias para grupos locales y pensar en traer a una figura de talla mundial. Lástima que el próximo año va a volver a estar una persona que tiene prejuicios con el Rock como es el pacato ese del Peñalosa.
