El pasado 31 de Marzo de 2016 el Congreso de la República, bajo el liderazgo de los presidentes de Senado y Cámara de Representantes lanzaron una estrategia de comunicación política en el marco del Plan de Acción para la transparencia legislativa denominada “Congreso Abierto y Transparente”.
La estrategia “por un Congreso Abierto y Transparente” se implementó en compañía de los presidentes de las Comisión de Ética del Senado y Cámara y su propósito era acercar al ciudadano a la Rama Legislativa, facilitando el acceso a la información y promoviendo prácticas transparentes al interior de la Corporación.
Para el entonces Presidente de la Cámara Baja, Alfredo Deluque, la iniciativa se trataba de “una apuesta contundente, un trabajo juicioso que conjuga muchos factores y que compromete de manera directa a todos y cada uno de los congresistas y funcionarios del Congreso, con el propósito de que se establezca como política para que se dé continuidad en las siguientes administraciones”.
En ese momento, el índice nacional de transparencia, medido por la ONG “Transparencia por Colombia” indicaba que la entidad se posicionaba en el último lugar, con un puntaje de 24,3, siendo la única entidad del país con un riesgo “Muy Alto”.
Luego de realizar un comprometido trabajo de la mano de la oficina de transparencia de la Presidencia de la República y conformar un equipo interdisciplinario dedicado únicamente a trabajar en el tema, se logró cumplir el plan de acción estipulado para un año, 6 meses antes de lo previsto; por tanto, la Cámara de Representantes subió del puesto 85 al 59, a un riesgo “Medio” y un puntaje de 76.4.
Para Deluque Zuleta esta es una manera de demostrarle a la corporación que con un trabajo juicioso se pueden avanzar en temas tan importantes como ese.