El fiscal no ha logrado ponerle ritmo a la Fiscalía después de la cuarentena. A los escándalos de sus declaraciones y viajes por el país, Francisco Barbosa se suma cinco reveses en algunos casos emblemáticos de su entidad. La familia Ambuila, envuelta en el escándalo de la DIAN, quedó en libertad por vencimiento de términos aunque siguen investigados y la extinción de dominio contra el gobernador del Magdalena Carlos Caicedo, señalado por las irregularidades en la adecuación de cinco centros de salud en Santa Marta, no se concretó por un choque entre las dependencias internas.
Por vencimiento de términos se han desquebrajado la mayoría de casos, al caso Ambuila se suma el abogado Alex Vernot, preso por supuestamente sobornar testigos para favorecer a Carlos Mattos, quien fue dejado en libertad después de 266 días sin haber iniciado el proceso tras el escrito de acusación. En la misma línea ocho de los diez señalados por el atentado del centro comercial Andino salieron de La Picota y el Buen Pastor e incluso, el fiscal encargado Miguel Olaya no ha dado cuenta de las pruebas clave.
Hace una semana el ex alcalde de Chía Guillermo Varela, destituido e inhabilitado por la Procuraduría, salió de la prisión domiciliaria esta vez por cuenta del juzgado único de conocimiento de Zipaquira, al parecer porque la congestión en este juzgado no dejaba avanzar el proceso. Los expedientes de la Fiscalía retoman su curso con la flexibilización de la pandemia mientras Francisco Barbosa sortea las polémicas a cuestas.