A raíz de la reciente polémica sobre el proceso de restitución de tierras, originadas por la presencia del Procurador Alejandro Ordóñez en dos eventos en la Costa Norte, San Alberto(Cesar) y Sabanas de San Ángel (Magdalena) bajo el liderazgo del presidente de la Federación de Ganaderos –Fedegán, José Félix Lafaurie, ha resurgido la polémica sobre el surgimiento de ciertos grupos de poder que se oponen al éxito de la ley de víctimas y restitución de tierras, que lidera el Gobierno Nacional, y entre los cuales se encontraría el movimiento de Restauración Nacional, un grupo que ha sido calificado por analistas como de Extrema Derecha, Conservador y Uribista, y que varios forjadores de opinión los han vinculado con un movimiento político de origen paramilitar y vínculos neonazis.
Nos hemos dado a la tarea de buscarlos y entrevistarlos para conocer sus posiciones y vínculos que existen con líderes políticos del Partido Conservador y del Uribismo, con el fin de conocer sus posiciones políticas y proyectos, que en medio de un proceso de paz se pueden convertir en una amenaza para su éxito o bien para crear un proceso de diálogo dentro de la sociedad colombiana entre posiciones contrarias entres sí, y que pueda llevar a construir las bases para consolidar una paz verdadera, justa y estable.
Entrevistamos en exclusiva al ingeniero Alberto Acosta, líder del movimiento, que nos concedió un espacio para aclarar las dudas que nos surgen.
Sandra: ¿Cuándo, dónde y quienes fundaron el Movimiento de Restauración Nacional?
Alberto: El movimiento fue creado en 2007, por un grupo de estudiantes de la Universidad de los Andes, preocupados por la situación social y política del país. Surgió como un círculo de participación política y estudiantil, que después fue ampliándose a otras universidades de Colombia.
Sandra: Pero según un informe revelado por Noticias Uno, se afirma que ustedes son el rencauche de un grupo político formado por paramilitares del Magdalena Medio, y auspiciado por ganaderos.
Alberto: Patrañas de la Sra. Cecilia Orozco y su equipo periodístico. Nosotros tenemos demando a ese noticiero por injuria y calumnia, y que en época electoral buscaba dañar la imagen de la representante María Fernanda Cabal y de Óscar Iván Zuluaga, a quienes acompañamos y colaboramos. Nuestro movimiento no solo no tiene nada que ver con el paramilitarismo ni con el nazismo, como ese noticiero buscó relacionarnos impíamente, sino que es radicalmente contrario a dichos postulados y medios para alcanzar el poder. Nuestro ideario y fundamentos se basan en la concepción católica de la vida, el reconocimiento de las raíces cristianas de la República, en la recuperación de los valores fundamentales de la sociedad colombianos y su nombre fue inspirado en las palabras de Álvaro Gómez Hurtado, quien dijo que su muerte no debería ser inútil sino un símbolo que convocara un movimiento de restauración en Colombia. Por lo tanto el ideario de nuestro movimiento es incompatible doctrinalmente con el nazismo, el cual es anticristiano, y el paramilitarismo, que usa la violencia indiscriminada para combatir a las Farc.
Buscamos rescatar el legado doctrinario de a Álvaro Gómez y su padre Laureano Gómez, tristemente olvidados por el Partido Conservador de hoy, que tiene poco de conservador y mucho de ‘lentejismo’.
Sandra: Nos dicen que son conservadores y católicos, pero porque los relacionan entonces con movimientos neonazis con vínculos con paramilitares.
Alberto: Guerra sucia. A falta de argumentos, los idiotas- en el término castizo de la palabra- recurren al insulto y desprestigio para callarnos, pero afortunadamente no lo han logrado. Que nos llamen nazis solo refleja la pobreza intelectual de nuestros contradictores, solo alguien con poca capacidad de raciocinio, como los fanáticos izquierdistas, pueden creer que una ideología ajena a nuestro continente, desparecida y derrotada hace más de 70 años y que solo tuvo repercusión en Alemania por un corto periodo, puede surgir en Colombia como movimiento político. Además el Nacionalsocialismo, o partido nazi, es una vertiente de izquierda, y su programa y métodos han sido los mismo de otros movimientos socialistas radicales. Si queremos ver en Colombia a representantes del nazismo solo dirijamos la mirada al Progresismo de Gustavo Petro.
Y en esa campaña sucia ha tenido mucho que ver la izquierda, quienes ven en nosotros un peligro para sus planes siniestros de acceder al poder sin contar con la mayoritaria aprobación popular. , Durante 8 años hemos llevado a cabo una acción continuada en contra de esas corrientes perniciosas para la sociedad colombiana en todos los frentes: contra las Farc, el socialismo del siglo XXI, el aborto, la eutanasia, la unión homosexual o la legalización de las drogas, que son las campañas que socialistas y liberales han emprendido contra la nación.
Sin embargo, déjeme contarle que el origen de esa campaña sucia no se dio en sectores de izquierda, sino dentro del mismo uribismo. Fue el señor Ernesto Yamhure, un abogado que si fue muy cercano a Carlos Castaño, obedeciendo instrucciones de Fernando Alameda, segundo a bordo del Centro de Pensamiento Primero Colombia después de José Obdulio Gaviria, denunció falsamente que una pandilla neonazi estaba al servicio de María Fernanda Cabal e injuriosamente nos acusó a nosotros que estábamos apoyando y trabajando en la campaña de la hoy representante. Anteriormente el señor Alameda contactó a nuestros aliados políticos y militares para que nos ‘abrieran’ de sus círculos y del Frente antiterrorista, que dio origen al Puro Centro Democrático.
Sandra: Bueno pero entonces no niegan su cercanía con la representante María Fernanda Cabal
Alberto: Por supuesto que no. Conocimos a la Dra. Cabal hace 6 años por su labor a favor de las comunidades negras del Urabá. Encontramos una afinidad ideológica y empezamos a trabajar juntos en causas, ya no solo en favor de las negritudes sino a favor de los militares perseguidos por una justicia politizada y fue cuando empezó a tomar forma una posible candidatura al senado de la Dra. Cabal, que nosotros mismos ayudamos a consolidar. Al final se lanzó a la cámara de representantes y nos comprometimos con su campaña.
Sandra: ¿Y con su esposo José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán?
Alberto: Nuestro acercamiento al Dr. Lafaurie curiosamente no fue por medio de la Dra. Cabal, sino por medio de nuestro interés en candidatizar dentro del Partido Conservador a un líder político con carácter y proveniente del Laureanismo. El Dr. Lafaurie, como conservador alvarista, representaba la línea doctrinaria de nuestro movimiento, y así fue que nos reunimos con él a mediados de 2013 para proponerle ser precandidato presidencial por el Partido Conservador.
Lafaurie no manifestó interés sino hasta 5 meses después, de postularse como precandidatos conservador. Así empezamos una labor de casi 2 años diseñando, elaborando y ejecutando la estrategia política para convertir al Dr. Lafaurie en presidenciable, y posteriormente candidato conservador a la presidencia.
Sandra: Pero no lo lograron, ¿Qué paso?
Alberto: Falta de tiempo. El Dr. Lafaurie tomó muy tarde la decisión de presentar su nombre entre la baraja de candidatos del Partido Conservador, pero aun así estuvo a punto de ganarle la postulación a Martha Lucia Ramírez, con quien ya estaba virtualmente en empate técnico entre los convencionistas conservadores, sino fuera porque abandonó su aspiración antes de la Convención azul para respaldar al candidato del Centro Democrático y fortalecer esta aspiración que en ese momento no había despegado.
Si no fuera por ese error político, Lafaurie habría sido el candidato de unidad del conservatismo y uribismo y por ende hoy presidente de la república.
Sandra: Y respecto a la oposición a los sabotajes al proceso de restitución de tierras y a los encuentros de víctimas, ¿qué han tenido que ver ustedes?
Alberto: Yo no los llamaría sabotajes sino pronunciamientos, visibilización de las verdaderas víctimas. Hemos querido participar en los foros organizados por la Universidad Nacional y la ONU, pero notamos que las victimas estabán perversamente inclinadas hacia los paramilitares y agentes del Estado, eso ha sido evidente y es muestra de la manipulación del proceso por parte de ONG y líderes de izquierda, que quieren tergiversar la historia presentando a la Farc como un pequeño grupo que solo originó el 20% de víctimas, y el resto del Estado.
En cuanto a la restitución, fuimos los primeros que nos pronunciamos en contra de la Ley de Victimas y Restitución, tanto que nos valió una columna de María Jimena Duzan en la que nos calificó de la mano negra. Y eso fue cuando aún el proceso de negociación Gobierno –Farc no se había hecho público. Fuimos nosotros quienes empezamos a revelar el contenido de los acuerdos y de la negociación secreta que llevaba Santos y Timochenko. Se lo dimos a conocer a la Dra. Cabal y después al expresidente Uribe.
Incluso, desde el mismo momento que fue candidato del uribismo, denunciamos que la posible lección de Santos sería un peligro para Colombia, no nos creyeron y aquí estamos, sufriendo las consecuencias de una pésima decisión de Uribe, quien le regalo la presidencia a una hombre camaleónico, experto en el engaños y la traición, propicio para negociar con fuerzas oscuras con tal de conseguir sus objetivos. Prácticamente hemos sido una permanente piedra en el zapato para santos y su acuerdo con las Farc de convertir a Colombia en la nueva república socialista de américa.
Sandra: Menciona usted que se han sido cercanos a las Fuerzas Militares, ¿Nos podría ampliar?
Alberto: La primera campaña que iniciamos fue a favor de la libertad al coronel Luis Alfonso Plazas Vega. Mientras todos sus más cercanos aliados políticos le dieron la espalda y los condenaron desde el mismo momento de su detención, incluso el mismo presidente Uribe, nosotros tomamos la bandera de su libertad, por la justicia y la verdad. Después de 7 años, cuando empezamos con 15 jóvenes con plantones frente al Palacio de Justicia, y con misas en la Catedral por los militares muertos y por los presos, logramos gracias a la Providencia la libertad del coronel Plazas Vega.
Fue una campaña dura que logró sus frutos, convertimos la causa en emblema nacional, a la que muchas personalidades terminaron sumándose. Periodistas y políticos se apersonaron de la causa y reforzaron nuestro pequeño esfuerzo inicial. Entre ellos debemos reconocer la labor desinteresada y ad honorem del periodista Ricardo Puentes, quien descubrió a los falsos testigos y que a la postre llevó a la absolución del coronel Plazas Vega.
Fue tan exitosa esta campaña que incluso el presidente Uribe invito a la Dra. Thania Vega a ser candidata por las fuerzas militares al senado de la Republica.
Sandra: ¿Con cuáles otros militares han trabajado?
Alberto: Nuestra labor a favor de los militares la realizamos muy de la mano con ACORE- Asociación Colombiana de Oficiales Retirados de las Fuerzas Militares. Desde el centro de estudios sociopolíticos empezamos a visibilizar a los presos políticos militares, entre los que se encontraban también el Gral. Rito Alejo del Rio y del coronel Hernán Mejía. Cuando nos acercamos a ellos propusimos la visibilización de los héroes militares que durante 25 años no habían sido ni mencionados en los eventos conmemorativos del Palacio de Justicia. Logramos incluso un puesto como candidato al senado por el Movimiento Fuerzas de la Unión por Mi País, iniciativa de ACORE para lanzar una lista al senado que representara a los militares. Desafortunadamente no logramos el umbral.
Sandra: Muy bien, pero lo que me ha contado no tiene nada que ver con lo que uno se imagina de ser un movimiento católico, más bien militarista.
Alberto: No dije que éramos un movimiento católico, el catolicismo no es un partido político o una ideología, es una religión, cuyos principios inspiran una sociedad, a sus miembros y las organizaciones que la conforman, y eso es lo que somos, un movimiento político inspirado en principios cristianos, nacionalistas en el sentido de amor a nuestra Patria, y conservador de la tradición hispánica y católica. Por ello nuestras acciones se dirigen a defender la Patria, la Fe Católica y de la Civilización, han buscado defensa de las FFMM, la Iglesia, la Familia y de la herencia hispánica.
Sandra: Pero entonces si son un movimiento de Extrema Derecha.
Alberto: Pues si defender la Fe, la Patria, la Familia y el Derecho, es ser de extrema derecha pues somos de extrema derecha. Si ser de extrema significa estar al otro extremo de lo que representa la funesta izquierda, somos de Ultraderecha. Lo que pasa es que hoy, en la modernidad dominada por un pensamiento liberal, lo único que tiene cabida en lo políticamente correcto es declararse sin principios, sin fundamentos, sin raíces, y nosotros somos todo lo contrario: defendemos los principios y no negociamos, en ese sentidos somos fundamentalistas y radicales, porque una sociedad sin fundamentos ni raíces perecerá como un árbol plantado sobre la roca o en la arena, que la tempestad azota y muere.
Esos apelativos no nos no nos preocupa ni nos afecta, es la reacción que tienen generalmente lo que carecen de argumentos para confrontarnos, su poca capacidad intelectual solo les permite manejar una sola acusación contra el oponente: nazi, facista, ultraderecha, zombie...
Nuestros discursos y acciones van dirigidas a esa gran mayoría colombiana que son conservadores y derechistas, que se oponen al comunismo, que son creyentes, están contra el aborto, el matrimonio homosexual y la legalización de drogas, en definitiva que quieren una Colombia Derecha. Hoy el correctismo político quiere convertirse en una aplanadora ideología, una tiranía del pensamiento liberal, que a lo malo llaman bueno y a lo bueno malo, y en eso si ha triunfado el liberalismo, en distorsionar los valores y los principios que dieron fundamento a nuestra sociedad, a toda Hispanoamérica.
Sandra: ¿Y por eso su cercanía al Procurador Alejandro Ordóñez?
Alberto: Con el procurador Ordóñez no hemos trabajo de cerca como si lo hicimos con el coronel Plazas Vega, la Dra. Cabal y el Dr. Lafaurie. Tenemos más bien una afinidad y cercanía ideológica con el Dr. Ordóñez, hemos apoyado las causas contra el Aborto, la Eutanasia, la legalización de las Drogas y el matrimonio homosexual, y es por ello que coincidimos en muchos escenarios. El Dr. Ordóñez representa todo aquello que defendemos y que son las bases de nuestra civilización cristiana, y por ello tiene nuestro respaldo y admiración.
Sandra: Pero ustedes le hicieron un homenaje cuando fue reelegido Procurador.
Alberto: Como le dije el Procurador Alejandro Ordóñez es una persona con principios, valores y talante conservador, y nuestra admiración la hicimos visible por medio de un merecido homenaje a su labor y su gestión. No solo fue un homenaje de Restauración Nacional sino de un reconocido sector de la sociedad colombiana, a la que asistieron representantes de distintas organizaciones anti-aborto, católicas, cristianas y defensores de la Familia.
Nosotros incluso no queríamos su reelección en 2012, porque fuimos el primero en el que pensamos como candidato presidencial. La crítica situación a la que nos ha llevado Santos, amerita un líder del talante del procurador Ordóñez para salvar a Colombia y desde ese momento hemos venido trabajando en redes sociales y actividades académicas y políticas para conseguir el respaldo del pueblo colombiano a la gestión y pensamiento del Dr. Alejandro Ordóñez.
Sandra: ¿En verdad ustedes creen que Ordoñez llegue ser presidente? Lo digo porque su imagen genera mucho rechazo en el ambiente político y sus posiciones ultramontanas lo catalogan como poco presidenciable.
Alberto: No importa lo que el ambiente políticamente correcto piense, sino lo que el pueblo piense y es lo que al final realmente importa. Fíjese en las encuestas: el Congreso, la presidencia, las Altas Cortes y los Partidos Políticos están por el piso respecto a la imagen que tienen entre los colombianos, pero allí están. Muchos colombianos están viendo en el Dr. Alejandro Ordóñez un hombre con carácter, que no teme enfrentarse al establecimiento modernista y liberal para defender a los colombianos ante el peligro amenazador que representa a las Farc en el poder. Incluso dese el Centro Democrático le hacen coqueteos para que sea su candidato presidencial. Si el Dr. Ordóñez piensa como piensan la mayoría de colombianos, no tenga la menor duda que los elegiremos como el próximo presidente de Colombia, si Dios así lo quiere.
Sandra: ¿Se lanzaría por el Centro Democrático o por el Partido Conservador?
Alberto: Realmente no sabemos. En este momento él es Procurador y no candidato presidencial. Esperamos que una vez finalice su gestión al frente del Ministerio Público podamos reunirnos con él para acompañarlo si decide lanzarse. Mientras tantos Restauración Nacional seguirá impulsándolo como el líder que necesita Colombia para recuperar la Nación que el Santo-Samperismo nos ha quitado.
Pero- como una reflexión muy personal- no veo al Dr. Ordóñez como candidato del uribismo, por cuanto el Centro Democrático ya hace mucho repartió la baraja y tienen definido para el 2018 a Oscar Iván Zuluaga o a Iván Duque, no al Procurador Ordóñez, debido a todo lo que el representa. Creo que engañosamente el uribismo quiere llevarlo al Centro Democrático para aprovechar su capital político y que entre a respaldar al candidato ungido por Uribe, tal como hicieron en 2014 con Lafaurie y Ramos, pero sin posibilidad real de convertirse en su candidato.
Veo más cercano al Procurador como aspirante por el Partido Conservador, cuyas bases lo respaldan abrumadoramente, pese que las directivas están cooptadas por el santismo. El Partido Conservador le daría la base electoral que necesita, y el aportaría sus convicciones, que han sido históricamente conservadoras y que hoy la colectividad las ha cambiado por mermelada. Amanecerá y veremos.
Sandra: Bueno, muchas gracias, Alberto por tan nutrida entrevista. Espero volver a verte y conocer más de su movimiento y sus miembros
Alberto. Con gusto Sandra. Gracias a ti por esta oportunidad de aclarar muchas dudas del movimiento y de tapar con la verdad las mentiras que nos han querido endilgar.
*Estudiante de Comunicación Social y Periodismo - Universidad Surcolombiana