La Biblioteca San Gabriel, ubicada en la vereda que lleva su mismo nombre, en Sopó, Cundinamarca, será administrada por la Alcaldía de este municipio, siguiendo los lineamientos dictados en la Ley 1379 de 2010, por la cual se organiza la Red Nacional de Bibliotecas Públicas, y el Acuerdo del Concejo Municipal No.008, por el cual se crea la “Red Municipal de Bibliotecas Públicas y Escolares” de Sopó Eduardo Carranza Fernández. En estos artículos reza, que las bibliotecas serán dependientes tanto administrativa como financieramente de la Secretaria de Cultura de la jurisdicción o quien haga sus veces. Así que no es capricho de la Administración Municipal, prescindir de los servicios de la Corporación Alejandría, quien llevaba disponiendo de este lugar por más de 12 años.
El contrato suscrito con la Corporación Alejandría tenía un costo anual de $ 64.300.000, lo que significa que la Biblioteca San Gabriel se estaba llevando casi un 50% más de inversión en comparación con las otras bibliotecas públicas del municipio. Todas las bibliotecas deben recibir recursos financieros iguales o equivalentes.
Es de aclarar que la Alcaldía de Sopó año tras taño ha incluido en su presupuesto las partidas necesarias para fortalecer y sostener las Bibliotecas Públicas del municipio, y la de San Gabriel no ha sido ajena a ello. La Corporación Alejandría, por su parte, gestionó recursos didácticos para el fortalecimiento del programa; recursos que la Corporación retiró del lugar una vez se les informó que no continuarían con la administración de la Biblioteca. Si en algún momento quisieron declararse leales al servicio social por una comunidad, en este caso, San Gabriel, ese supuesto sentido de pertenencia y sensibilidad queda desvirtuado. Ha sido evidente el interés personal y particular al haber desocupado el lugar, llevándose gran parte de su inventario.
Con el ánimo de dar a la Biblioteca San Gabriel un mayor sentido de progreso, mejoramiento y protagonismo, marcado por la calidad en la formación de quienes hacen uso de ella, la Administración Municipal asignará a profesionales de la Escuela Recrearte en áreas artísticas y culturales, para ofrecer a sus visitantes, programas de contenido formal, de los cuales puedan salir grupos representativos. Esta apuesta cultural y formativa no ha podido iniciarse, ya que la directora de la Corporación Alejandría, María Isabel Escobar, no ha accedido a entregar las llaves de la Biblioteca, aduciendo estar de viaje, ni tampoco ha delegado a alguien para su entrega.
Por otra parte, el reporte de personas atendidas por la Biblioteca San Gabriel, emitido por la Corporación Alejandría, en donde se afirma haber atendido en el año 2015 a 68.400 personas, dista de la realidad. Las estadísticas, presuntamente, están siendo manejadas de manera errada; al parecer están contando a un mismo niño más de una vez, es decir, registraron al “mismo niño” X cantidad de veces.
Con relación al artículo de opinión, escrito por Erika Ávila, y publicado el pasado 13 de Febrero, se demuestra un marcado desagrado hacia esta Administración y su Alcalde William Venegas. Es una opinión viciada de antipatía y resentimiento. Con respecto a la misma, se aclara:
- Que a Sopó, ni a su Administración, ni a su Alcalde se le “ha olvidado que tiene una de las mejores bibliotecas de Colombia”. Por el contrario, tan presente está en el trabajo diario de esta Alcaldía, que esta Biblioteca es una prioridad para el municipio y la comunidad que la visita, no en vano, se están adelantando todos los esfuerzos para que muy pronto pueda retomarse el servicio con docentes de calidad profesional.
- La Sra. Ávila, no es de este municipio, así que su opinión es sesgada y no representa el sentir de un grupo colectivo de usuarios, ni mucho menos de los Soposeños.
Con esta publicación queremos dejar el tema dirimido, y a partir de aquí no entraremos a desmentir cualquier noticia que busque sacar provecho político de una decisión debidamente justificada que ha tomado la Administración Municipal, sin coacción alguna y simplemente respondiendo a sus competencias constitucionales y legales.
