El debate sobre la transformación de la ciudad de Cali y su infraestructura institucional en un distrito especial cultural, empresarial, turístico y deportivo está abierto después de entrar en vigencia la Ley 1933 de agosto del 2018, que ordena adecuar la alcaldía, sus 22 comunas y 15 corregimientos a la Ley 1617 del 2013 que regula la materia de los distritos.
Cali adelantó en el año 2016 una reforma administrativa y todo indica que los resultados no son los convenientes para resolver las diversas problemáticas que aquejan a sus habitantes.
La ciudad presenta agudas problemáticas de orden fiscal, económico, de seguridad, ético, ambiental, urbanas y de participación democrática para las cuales el modelo distrital no parece ser la alternativa óptima según la fundamentada argumentación del edil Marcel López y del profesor universitario Alberto Ramos, para quienes la improvisación en el trámite de la ley da pie a la corrupción, el clientelismo y a nuevas cargas tributarias sobre la ciudadanía al implementar la organización de 5 localidades con sus Fondos presupuestales y Alcaldes respectivos.
Ramos sugiere en su análisis citado intentar compatibilizar el distrito con la organización del área metropolitana, incluyendo ingredientes de la ciudad-región, sobre todo para asumir los desafíos ambientales, de seguridad, desarrollo y movilidad que se presentan con la conurbación envolvente que atrapa a los municipios de Palmira, Jamundí, Yumbo, Vijes, Candelaria, Florida y Puerto Tejada.
Barney Caldas y un equipo profesional ligado a la Sociedad de Mejoras Públicas sugieren sumar al debate los temas del ordenamiento territorial y urbano para proyectar la ciudad (metropolitana y región) sobre el corredor urbano de las carreras 25 y 26 y de esa manera generar soluciones de movilidad regional, de espacio público, de empleo, de desarrollo comercial y ambientales.
Los anteriores son elementos que componen el debate que ya camina, del cual participan entidades como la Cámara de Comercio de Cali, el Comité Intergremial y Empresarial del Valle, (Ciev), la Corporación Consorcio Ciudadano, la Fundación para el Desarrollo Integral del Pacífico, FDI, la Sociedad de Mejoras Públicas, SMP, y la Unidad de Acción Vallecaucana, UAV.
La ley da un plazo para que la alcaldía y el Concejo municipal expidan los acuerdos y normas reglamentarias que aterricen las disposiciones de la 1933 (2018) y de la 1617 (2013), para lo cual Hugo Javier Buitrago, director del Departamento Administrativo de Desarrollo e Innovación Institucional de Cali, ha dicho que la implementación de Cali como distrito especial será un proceso complejo que se debe trabajar paulatinamente. Buitrago a señalado que el proyecto de reglamentación lo llevaran al Concejo entre mayo o junio (2019). Para todas estas actividades han nombrado a Alejandro Becker como la persona encargada de gerenciar los desarrollos del marco legal distrital.
Desde el lado de la sociedad civil hemos registrado ante la Personería de la ciudad la veeduría ciudadana “Cali Distrito Especial con derechos y equidad”, de la cual hacen parte varios líderes comunitarios con el fin de intervenir y aportar en todo este trascendental proceso de cambios en la capital del Valle del Cauca.
