Toda reforma laboral implica una modificación a las normas del Código Sustantivo del Trabajo y otras normas complementarias.
El objeto primordial del Código es la de lograr la justicia en las relaciones que surgen entre empleadores y trabajadores, dentro de un espíritu de coordinación económica y equilibrio social.
Así mismo, el código define al trabajo como toda actividad humana libre, ya sea material o intelectual, permanente o transitoria, que una persona natural ejecuta conscientemente al servicio de otra, y cualquiera que sea su finalidad, siempre que se efectúe en ejecución de un contrato de trabajo.
De igual forma, el código define al contrato de trabajo como aquel por el cual una persona natural se obliga a prestar un servicio personal a otra persona, natural o jurídica, bajo la continuada dependencia o subordinación de la segunda y mediante remuneración.
Es decir, el trabajo y el contrato de trabajo, son unas situaciones jurídicas, con características especiales.
La Reforma Laboral que propone el Gobierno busca materializar la finalidad de la ley en las relaciones laborales. Pero en el mismo sentido, busca materializar mandatos constitucionales tales cómo: Igualdad de oportunidades para los trabajadores; remuneración mínima vital y móvil, proporcional a la cantidad y calidad de trabajo; estabilidad en el empleo; irrenunciabilidad a los beneficios mínimos establecidos en normas laborales; facultades para transigir y conciliar sobre derechos inciertos y discutibles; situación más favorable al trabajador en caso de duda en la aplicación e interpretación de las fuentes formales de derecho; primacía de la realidad sobre formalidades establecidas por los sujetos de las relaciones laborales; garantía a la seguridad social, entre otros.
Una Reforma Laboral no tiende a que haya más empleo en el país, sino que se equilibren las relaciones entre los empleadores y los trabajadores, por las posiciones de poder que recaen sobre esta relación particular. Una Reforma Laboral regula situaciones jurídicas que nacen de un contrato de trabajo y bajo el entendido del trabajo como definición legal.
Para que haya más empleo en el país, se requieren políticas que tiendan a la industrialización y al aumento de la productividad acompañada de innovación, lo cual está directamente relacionado con las apuestas educativas en ciencia y tecnologías de la información.
Esperemos que pueda haber un equilibrio entre los derechos y garantías mínimas de los trabajadores y el crecimiento económico de las empresas. Lograr eso es lo óptimo, lo demás es tiranía del uno o del otro.
