A propósito de la publicación del día 31 de mayo de 2017, titulada “El misterioso dueño del Búnker en los Cerros Orientales de Bogotá que será demolido” . “Juan Waked, que ha bordeado la ilegalidad, arrasó 14 mil metros de bosque para levantar las oficinas de El Bambú con una vista sobre Bogotá que la CAR ordenó tumbar” y de conformidad con el Derecho de petición presentado por el abogado José Alfredo Escobar Araújo, en representación del señor Jean Feghali, Las2Orillas rectifica lo siguiente:
1.- Que el ciudadano Jean Feghali, es persona distinta a Jean Ibrahim Feghali, o Jhon Nasser y no es cierto que tenga ocho nombres ni que su presencia en nuestro país sea fantasmal ni abarque un complicado historial en los últimos treinta años con una fachada de exitosos negocios. Por el contrario, es un conocido empresario que se desempeñó como Embajador Plenipotenciario de Panamá (1999-2004) y se ha dedicado a la Finca Raíz y a los Sectores Turísticos y Hoteleros, quien no ha tenido problemas con la justicia, pues no registra a la fecha antecedentes o requerimientos judiciales, ni menos aún existen elementos materiales probatorios o evidencias físicas que infieran su participación en entramado criminal alguno o que acrediten su autoría o participación en el delito de contrabando de textiles o confecciones o de algún otro género en nuestro país. Por todo ello, no es posible afirmar que ha bordeado la ilegalidad o que sea un personaje misterioso, o que se le pueda denominar como “capo” del contrabando de textiles o confecciones, como equivocadamente se sostuvo en dicha publicación.
2.- Que el predio “El Bambú”, ubicado en los Cerros Orientales de Bogotá, no es de su propiedad, sino de la empresa Comercializadora Kaysser, por lo cual no es el dueño del denominada Bunker que probablemente será demolido, ni es correcto afirmar que ha arrasado 14 mil metros de bosque en ese lugar, tanto más cuanto que se verificó que los procesos que adelanta la CAR Regional Bogotá-Cundinamarca solo van dirigidos contra la mencionada sociedad y su nombre no aparece relacionado dentro de los mismos.
3.- Las2Orillas lamenta los posibles daños ocasionados a su buen nombre, a su honra, reputación e intimidad, a raíz de la aludida publicación el artículo en mención.
