El director de Human Rights Watch se encontraba reunido en Palacio con el Consejero para los Derechos Humanos Guillermo Rivera cuando irrumpió el Presidente Santos, quien horas antes había reaccionado con contundencia al informe que compromete a 16 generales con falsos positivos: "que no nos vengan a manchar la institución y que no hay una sola investigación en contra de estos altos oficiales". Las relaciones de la Human Rights Watch con los gobiernos de Uribe y Santos no ha sido particularmente buena: Vivanco fue la piedra del zapato del gobierno Uribe denunciado los falsos positivos con Santos como ministro de Defensa y frente al proceso de paz ha sido radical en pedir castigos penales para las Farc. Santos y Vivanco tan solo conversaron durante diez minutos y el Presidente se excusó informando que tenia una reunión con empresarios petroleros.