El portal belelu.com enumeró los ocho peores novios que una mujer puede tener, de acuerdo a su profesión. Según el artículo hay profesiones que convierten a los hombres en malas parejas, bien sea por falta de tiempo libre, por fomentar el ensimismamiento o por los horarios. Teniendo en cuenta estos factores, el portal enumeró las diez peores profesiones que el novio de cualquier mujer puede tener.
8. Políticos y abogados
Es sabido que los primeros necesitan tener y aprovechar el poder de convencimiento para ascender, igual sucede en una relación, por lo cual de entrada generan desconfianza. Por su parte los abogados también necesitan un alto nivel de credibilidad, además de que tienden a ser egocéntricos y por su trabajo, deben alcanzar metas, en muchos casos, valiéndose de cualquier método.
7. Ingenieros
En teoría porque suelen ser tan cuadriculados como tímidos. Tienden a ser asociales aparte de poco creativos. Con ellos se puede establecer una relación y mantenerla sin problema alguno, pero a la hora de mantener viva la llama de la pasión, esto es un gran obstáculo.
6. Profesores universitarios
La razón es muy simple, por los celos. Hay que tener en cuenta que un profesor universitario puede fácilmente conocer mujeres jóvenes y atractivas, aparte es muy común que se establezcan relaciones entre alumna y profesor, sin contar que muchas de ellas fantasean con su profesor. Hay que tener en cuenta que esta profesión denota inteligencia, lo cual para muchas mujeres es un factor afrodisiaco. El asunto es peor aún si se trata de un profesor atractivo.
5. Médicos y odontólogos
Hay dos razones para ubicarlos en este ranking. La primera es por los celos ya que el tener tanta cercanía física y contacto con otras pacientes puede resultar una tentación en bandeja de plata. El segundo factor es el hecho de que como bien se sabe, su profesión exige entrega de tiempo completo. Si usted es la pareja de un médico debe estar preparada para no disfrutar su compañía en muchas fechas especiales.
4. Actores y músicos
Razones obvias. La tentación está por naturaleza en su ámbito de trabajo y será directamente proporcional al éxito que tengan en su trabajo. Suelen despertar admiración entre su público y muy posiblemente tendrán fanáticas que quieren algo más que una bonita amistad con ellos. En el caso de los actores la situación es peor, pues usted debe dar luz verde a su pareja para que pueda hacer con sus compañeras las mismas escenas de amor que hace dentro de su relación.
3. Chefs
Por naturaleza aman su trabajo, todo el tiempo están pensando en texturas, sabores y olores para llevar a la mesa. En efecto, tienden a amar más a su trabajo que a su pareja pues mientras usted está armando planes para el fin de semana, él está pensando en recetas para ese entonces. Su trabajo se extiende más allá de un horario; es un estilo de vida y usted no puede impedirle que saque su cabeza de la cocina. Ni hablar de la posibilidad de ir a cenar con él.
2. Periodistas y escritores
Ambos tienen que leer mucho y su trabajo demanda una sintonía con el mundo todo el tiempo. Si es periodista no se le ocurra pedirle que apague su celular pues él necesita estar disponible para dejarle la cena servida en caso de que asesinen al presidente, sin que usted tenga derecho a reclamo alguno. Aparte de ello, tenga en cuenta que está con un hombre que por la naturaleza de su oficio es un stalker profesional. En el caso de los escritores, estos viven de la creatividad y los trabajos relacionados con esta suelen ser absorbentes aparte de estar muy mal pagados. Con toda seguridad, en más de una ocasión él preferirá quedarse todo un fin de semana desarrollando la historia que se le ocurrió, en lugar de compartirlo con usted.
1. Diseñadores y fotógrafos
Como se dijo anteriormente, los trabajos dónde la creatividad es la fuente prima suelen estar muy mal pagados y ocupar todo el tiempo. En el caso de los fotógrafos ellos están más pendientes del entorno y de su cámara, que de su pareja. Si es diseñador, su trabajo es altamente exigente y él pasará horas enteras ultimando hasta el más mínimo detalle en cada uno de sus proyectos. Nunca tendrá tiempo para usted y si lo tiene, será un espacio tan pequeño como la cifra que podrá gastar a la hora de invitarla a algún restaurante.
@enriquecart