De los 21 puntos que disputó el Deportivo Cali en su casa, el estadio de Palmaseca, los azucareros sólo habían hecho 8 puntos. De los últimos diez encuentros del Cali contra Boca los colombianos sólo habían ganado uno, en el 2001, 3-0 con ese equipo que dirigió Luis Fernado Suarez y que tenía entre otras estrellas a Oscar Cordoba, Victor Aristizabal y Valenciano. Era el peor momento para debutar en una Copa Libertadores. El Cali, a pesar de haber ganado en diciembre la Liga, su caída en este torneo no podría ser peor. En este momento ocupa la penúltima casilla, era un desastre, de las peores presentaciones de un campeón colombiano reteniendo su corona en la historia. A Dudamel le daban con todo, Oscar Rentería, desde el Pulso del Fútbol, decía que era casi un chepazo el haber obtenido la Liga. Pero el peor de todos era Carlos Antonio Vélez.
Sólo a un técnico le había ido peor en boca de Vélez, era José Nestor Pekerman. En una actitud que a veces rayaba en la xenobofia, se metió con Dudamel incluso durante su espectacular torneo. Ahora que le iba muy mal no se sonrojaba para sacar pecho por la desgracia ajena. A principios de marzo Carlos Antonio dijo esto desde su programa en Antena 2 "Se acabó lo que Arias dejó y sin Teo no hay paraíso. Que impotencia! Que falta de recursos! El “humo” se desvanece ante el más mínimo soplo de brisa! El “espíritu de Kiev” fue rojo. Con el simple orden defensivo llegó la empelotada".
Es que la teoría de Vélez es que Dudamel había apoyado su torneo, su triunfo en ese torneo, en el trabajo de Alfredo Arias, el técnico uruguayo que lo precedió. Pero todo esto quedó borrado este martes 5 de abril cuando de manera espectacular el Deportivo Cali se convirtió en uno de los pocos equipos colombianos en derrotar al Boca con el contundente 2-0. Uno se pone a pensar, que hubiera pasado si a Dudamel no le hubieran desarmado el equipo quitándole a baluartes como Harold Preciado.
Este martes 5 de abril, una semana después de la verguenza que nos hizo pasar la Selección con su eliminación, el fútbol colombiano tuvo un día de ensueño, con el partidazo de Luis Diaz con el Liverpool y la sonora victoria del Cali. Uff, el único que debe estar triste es el periodista de siempre.