Al menos, en lugares alejados de la Costa Atlántica colombiana, es posible que muchos colombianos no tengan el nombre de Rafa Pérez en su radar. Pero tan sólo el millón de seguidores que tiene en Instagram o su paso por Los Chiches, Los Diablitos y Grupo Kvrass, son detalles que hacen que cualquier admirador curioso se detenga a pararle bolas a este genio del vallenato.
Entre sus principales éxitos están como “Ella es la que manda” (con Omar Geles), “Dele que dele” o “Mi novia mujer”, que suman varios millones de reproducciones en varias plataformas. Varias de estas canciones tienen una particularidad, que fueron grabadas en vivo.
En un podcast llamado Vallenatos Con Ali, Rafa Pérez y el presentador hablan de cómo él habría sido pionero en grabar discos en concierto y no en estudio como suelen hacer muchos artistas, por lo menos en este género. Una estrategia que en la música popular también le ha funcionado muy bien a artistas como Luis Alfonso.
Lo de lanzar canciones en vivo no se le ocurrió de la nada, sino que es una idea que le surgió al ver que los mayores éxitos vallenatos tienen videos en concierto que acumulan millones de videos en YouTube: “Vivo en el limbo” de Kaleth Morales, “Me vieron llorando” del Binomio de Oro o “La colegiala” de Silvestre Dangond, por citar algunos.
En el mismo programa de entrevistas, Rafa Pérez también recuerda el video de “Niégame tres veces” de Silvestre, que ya suma más de 450 millones de vistas en YouTube. En esa época todos los videos del nativo de Urumita eran en concierto, posiblemente porque él había llegado a una conclusión muy parecida.
Hace años, cuando Rafa Pérez comenzó a entender la importancia de las grabaciones en vivo, no tenía tanto éxito como cantante solista. A pesar de haber pasado por grandes agrupaciones vallenatas como Los Diablitos, Los Chiches y haber fundado Grupo Kvrass, su carrera independiente todavía no despegaba.
Pero ser tan crítico consigo mismo y darse tanto palo, lo llevó a desarrollar conclusiones magníficas que le pueden ser útiles a cualquier cantante que quiera vender sus conciertos. De acuerdo a la sabiduría Rafaperezca, a un artista lo pueden contratar por alguna de las siguientes cuatro razones:
Tener el éxito del momento, contar con un gran catálogo de canciones que la gente quiera cantar a pulmón, ser capaz de hacer un gran show que la gente se muera de ganas por ver y generar emociones, para que cada que la estrella presente su espectáculo la gente necesite presenciarlo de cerca.
Algunos medios especializados en vallenato han referido a Rafa Pérez como la figura más influyente de la actualidad. Con ese tipo de reflexiones es fácil entender las razones.
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Rafa Pérez, el músico que te toca cualquier instrumento
Rafa Pérez nació en 1984 en Chiriguana y comenzó su carrera como cantante doce años más tarde, en un coro de la iglesia del pueblo que se llamaba Ángeles de la Juventud y en esa época también tocaba platillos, bombo, trombón y guitarra. Todo lo aprendió de forma empírica.
A los 17 ya cantaba merengue dominicano en la Orquesta Sensacional de Curumaní, pero gracias a esta agrupación conoció a Yader Romero. Con quien en 2007 y en compañía de Luis ‘El Nene’ Carrascal y Kennel Yanci formará Grupo Kvrass.
La premisa de Grupo Kvrass era sencilla, ir en contra de todo lo que se hacía entonces en el vallenato colombiano. Ser irreverentes, transgredir las reglas con las que se solían escribir canciones de ese género y, lo más importante, lanzar buena música.
Su disco debut llamado Ombe y cómo no, que habían lanzado un año antes,fue nominado al Latin Grammy en 2009 como Mejor álbum de cumbia o vallenato. Pero ese año Peter Manjarrés fue el ganador.
Ahora, a más de diez años de ese éxito tan arrollador que tuvo Grupo Kvrass, Rafa Pérez siente que el éxito los superó, sobre todo en la costa colombiana donde siempre han sido gigantes con canciones como “Qué me beses” o “Tay loco”.
Todo ocurrió de forma muy rápida y al poco tiempo de estrenarse como banda ya estaban codeándose con grandes como Marc Anthony, Juan Luis Guerra o Natalia Jiménez. Pero también fue esa vertiginosidad en el ascenso, la que complicó las relaciones entre los integrantes.
En 2016, Rafa Pérez abandonó la agrupación y dos años más tarde Él Nene’ Carrascal hizo lo mismo. Estas renuncias evidenciaron una pelea por dinero y por derechos que sigue vigente hasta la actualidad.
El tiempo de Rafa Pérez cantando vallenatos románticos con Los Chiches y Los Diablitos
Pero antes de ayudar a consolidar esta agrupación que se atrevió a fusionar el vallenato con pop, Rafa Pérez también fue integrante de Los Chiches, Los Diablitos y trabajó con Miguel Morales, Beto Zabaleta, Diomedes Dionisio Díaz y Beto Zabaleta, entre otros reconocidos músicos de la costa colombiana.
No duró mucho en estas agrupaciones, pero sí consolidó una relación con colegas como Amín Martínez de Los Chiches Vallenatos (para quienes no entiendan de vallenato, el man que inmortalizó “Tierra mala”) y con Omar Geles, con quien se cruzó durante su breve paso por Los Diablitos. En los últimos años, compartió con ambos tanto lanzamientos como conciertos.
También se cruzó con otros ídolos vallenatos como Israel Romero del Binomio de Oro, Wilfran Castillo, Rolando Ochoa, José Alfonso ‘Chiche’ Maestre o Marciano Martínez, un compositor famoso por haber creado éxitos como “Amarte más no pude” o “La juntera” de Diomedes Díaz.
Además, otra estrategia que aplicó Rafa Pérez fue grabar canciones de artistas fallecidos como Diomedes Díaz o Rafael Orozco, entendiendo que, al no estar disponibles los intérpretes originales, era más fácil que la gente se enamorara de sus nuevas versiones de estos éxitos. Para él tiene mucho más sentido revivir estas composiciones, que quedarse atado al catálogo de Grupo Kvrass, una agrupación que considera que no hace parte de su presente como artista.
La actualidad de Rafa Pérez
Llamar a Rafa Pérez el artista más influyente de la nueva generación del vallenato, como lo han referido en varios portales de noticias de este género, puede ser polémico y más en un ambiente donde hay tantos otros artistas como Mono Zabaleta, Penchy Castro, Karen Lizarazo o Ana Del Castillo, que sueñan con dejar su huella en el género.
Pero una carrera de más de 20 años en la música, con reflexiones tan acertadas y con logros tangibles como los de Rafa Pérez, hace que sea necesario prestarle atención a su pequeño, mediano o gigante legado en la música colombiana.
Hace pocos meses su canción “Dele que dele”, una de las más de 1.000 composiciones terminadas que nos quedaron del maestro Omar Geles, fue la canción oficial de los carnavales. Su último lanzamiento llamado “La dueña de mi vida”, también fue grabado en vivo, pero en medio de un concierto en el mítico Parque de la Leyenda Vallenata.
De acuerdo al portal Monitor Latino, uno de los más respetados para la medición del impacto de las canciones en el continente, “La dueña de mi alma” es una de las cinco canciones tropicales que más están sonando en las radios colombianas. Por encima, incluso, del último éxito de Silvestre Dangond.
