Una cifra preocupante entregó la policía del departamento del Putumayo con respecto a los accidentes de tránsito que en lo que va corrido del año. La mayoría se han presentado en la madrugada y a causa de la embriaguez de los conductores.
El coronel Ricardo Suárez Laguna, comandante de la policía en el Putumayo, señala que a pesar de las casi 200 campañas “No vayas en contra vida”, en el departamento se registra un alto índice de accidentalidad por culpa, más que todo, de la ausencia de cultura ciudadana.
Según el mismo oficial, en el año se han presentado 134 accidentes de tránsito de los cuales 78 se han presentado en vías nacionales y 56 en perímetro urbano, donde lamentablemente 37 persona san perdido la vida, 152 lesionadas, involucrados 30 motocicletas y 75 vehículos.
La mayoría de los accidentes se presentan en las primeras horas del día, y sobre todo los fines de semana, donde la mayoría de los conductores conducen en estado de embriaguez y en otros casos obedece al incumplimiento e irrespeto a las normas de tránsito como falta de pericia en el manejo, adelantamiento en sitios prohibidos y exceso de velocidad.
En los últimos 40 días se han registrado nueve accidentes de tránsito con un saldo de nueve personas lesionadas y tres fallecidas.
Reporte
Una persona capturada y judicializada por homicidio culposo en accidente de tránsito; 620 comparendos, 60 de ellos a conductores por conducir bajo estado de embriaguez, 256 por no portar licencia de conducir, 43 por licencia de conducción vencida, 36 por falta de revisión tecnomecanica, 59 por irrespeto a las normas vigentes de tránsito, 17 por no utilizar el cinturón de seguridad, 21 por transitar en horarios restringidos, 25 por sobrecupo, 32 por no portar el Seguro Obligatorio contra Accidentes de Tránsito (SOAT); 13 por no portar tarjeta de propiedad y 2 por el no porte de placas. Igualmente se ha multado a personas por no reportar el cambio del número del motor y por la utilización de vidrios polarizados sin permiso, entre otros.
El coronel hizo un llamado a los conductores para que acaten las normas y, en especial, para que no conduzcan bajo estado de alicoramiento.