Como es costumbre cuando sucede una manifestación ciudadana en Colombia, la mayoría de políticos, sino son todos, apoyados por algunos periodistas del establecimiento, solo hablan sobre los actos vandálicos de las marchas.
¿Pero quiénes son los mediáticos vándalos a los que la mitad del país les está culpabilizando por todas las desgracias que suceden aquí, no solo en las marchas, sino siempre?
Son colombianos que desde el día que nacieron no conocen otra cara que la violencia y que han visto cómo las fuerzas militares y policiales, en vez de protegerlos, los han reprimido, amenazado, masacrado.
Son ciudadanos que están mamados de la corruptela del Congreso, donde los legisladores junto a sus amigos y sus familias son ciudadanos de primera clase y el resto del país, unos pobres huevones condenados a morir de hambre, sed, angustia, resentimiento...
Son aquellos a los que el gota a gota, el banco y el gobierno los han dejado sin casa. Son los que no encuentran un futuro ni para ellos ni para sus hijos.
Son los daños colaterales de los múltiples conflictos de esta nación, en la que no se gobierna para los cincuenta millones de habitantes que hay, sino para un muy grupo reducido de personas, en el que muy seguramente ni usted ni yo estamos.
Son los familiares de los falsos positivos, son los hijos de personas que a las que les han saqueado y robado sus fincas, son amigos de personas inocentes que han muerto en el conflicto armado.
Esto no quiere decir que me parece bien lo que han hecho durante estas protestas, ¿pero y los responsables de los escándalos de corrupción, violencia, masacres, de los desplazamientos más grandes del país?, ¿los responsables de la inequidad tan rampante, porque en Colombia existen señores feudales, mafias trasnacionales, guerrillas, paramilitares y todo lo que se le parezca?
Muchos de ellos están hoy están libres, con escoltas, un bufete de abogados a su disposición, y esos mismos periodistas, a los que les encanta llamar "desadaptados sociales" a los que rompen un vidrio del TransMilenio, a estos si no los llaman "vándalos" sino "doctores", "excongresistas", "exalcaldes".
¿A ellos cómo se les llama? Como a unos respetables ciudadanos a los que se les respeta su "presunción" de inocencia, pero al que lanzó la piedra en la plaza de Bolívar es el peor criminal jamás visto.
La doble moral hecha carne y hueso, amén.