“Tengo que ofrecer una disculpa”. Fue lo primero que dijo Steve Harvey, tres minutos después de haber anunciado que la Miss Universo 2015 era la colombiana Ariadna Gutiérrez. Cual si fuera una de sus escenas como comediante y quisiera hacerle una broma pesada al mundo entero al igual que lo ha hecho en su talk show, el presentador esta vez sí se había equivocado. “La virreina es Colombia. Miss Universo es Filipinas. (…) Por favor déjenme tomar control de esto. (En ese momento Harvey señalaba la tarjeta de los jurados) Esto es exactamente lo que aparece en la tarjeta. Yo voy a asumir la responsabilidad por esto. Fue mi error, está impreso en la tarjeta. Es un error terrible pero puedo mostrar aquí mismo la virreina es Colombia, es mi error”, se lamentó pero muchos pensaban que quería pasar a la historia como provocador, aunque lo cierto es que acababa de pasar la peor pena de su vida.
Harvey fue estudiante mediocre de la universidad de West Virginia, incluso antes lo había intentado en la universidad de Kent, pero sus fallas no lo dejaron avanzar. Fue boxeador, mecánico de caros, vendedor de seguros, limpió alfombras y llegó hasta mensajero. Era bueno para burlarse de la gente pero no para hacer reír. A mediados de los ochentas se presentó en cuento concurso había de comediantes, no pasaba las pruebas y entendió que debía reírse de la gente pero con un poco de humor más inteligente; escribir los guiones por ejemplo antes que improvisar. Cuentan que le cayó en gracia a uno de los guionistas de un show en el canal ABC quien le dio la oportunidad de aparecer en la comedia Los muchachos y yo. Quiso ser cantante pero también fracasó.
El director de cine Spike Lee le daría la mano y una película documental suya sobre comediantes sería el trampolín para que Harvey dejara el anonimato. Tres esposas, siete hijos y uno que otro escándalo por la bebida lo llamaron a ser portada de algunos periódicos. Escribió un libro donde contó lo duro que la vida lo había tratado pero donde olvidó contar lo duró que era con sus chistes frente a las celebridades. Famoso, tuvo su propio programa a mediados del año 2005, y ante el consumismo norteamericano que todo se lo traga, le fue bien en rating, mientras su mánager peleaba para que mejorara su carisma. Lo hizo y se catapultó. Trabajó en papeles menores junto a Beyonce y Cuba Gooding Jr. Pero su jugada maestra fue hacer programas de humor para recoger fondos con el objeto de llevar los dineros a la gente más necesitada.
Bueno para entretener, así fuera con chistes flojos dese el año 2010 inició su carrera como maestro de ceremonias. Lo hizo hasta en los cuadriláteros de boxeo donde nunca pudo ganar en el pasado. En el 2015 la organización de Miss Universo lo escogió como el maestro de ceremonias, remplazando al serio Thomas Roberts, quien lo hizo muy bien el año pasado. Lo que acaba de suceder en uno de los eventos más cotizados de la televisión mundial hoy es motivo de disculpas para Harvey, quien pronto seguirá haciendo malos chistes y hasta mofándose de no haber sabido leer los resultados de los jurados. Curiosamente varios artículos de prensa cuando hablan de Steve Harvey advierten que no se debe confundir su nombre con el de Steve Harley, un reconocido cantante de los setentas.