Con frecuencia en redes sociales, así como en la calle, veo algunos amiguitos ciegos o con baja visión, proclamando el final de nuestra escritura. Ah sí, es que come mucho papel, dicen unos. Es que leerlo es muy difícil, balbucean otros. La pizarra y el punzón no me gustan, comentan unos terceros.
Quien se la pasa diciendo que el braille va a morir, en mi opinión personal, está condenando una esencia que más de 200 años después se ha mantenido con naturalidad. Louis Braille, un gran personaje inventor de nuestra escritura, cambió la vida de muchas personas con ceguera total.
Seis puntos u ocho puntos son para escribir lo que uno quiera: poemas, cartas de amor, sentencias judiciales, libros, relatos cortos, historietas, notas musicales, fórmulas matemáticas, etiquetas de medicamentos, señaléticas de ubicación, botones de ascensores y muchísimas cositas que forman parte de nuestra vida diaria.
En el colegio, universidad u oficina, las pizarras y punzones son herramientas para el desarrollo de nuestra independencia. Por eso este modo de escritura es vital para nuestro proyecto de vida, independientemente de cual sea el camino a tomar.
Ahora bien, causó revuelo hace algunos meses una publicación de un torito desocupado, que en Facebook y WhatsApp se atrevió a decir que nuestra escritura era el código del diablo, ¿ah? ¿Qué tú y yo estamos locos Lucas? Dejo el texto para que veamos por qué algunos con unos cuantos toques de cerebro, desorientan a algunos despistados.
¿Estamos poseídos? por Lydia Usero:
En un ejercicio de búsqueda por la Internet, el compañero Yadiel Sotomayor se topó con el artículo titulado “Braille- The Devil’s Secret Language!” (“¡Braille- El Lenguaje Secreto del Diablo!!”), escrito por un supuesto Pastor Bautista de nombre Ezequiel. Según él las personas que tontamente creen que el braille es un alfabeto atrasado inofensivo están equivocadas, ya que, ¡El braille es el lenguaje secreto de Satanás! Dice además, que el braille fue inventado por Louis Braille, un pervertido francés zurdo de quince años, que quedó ciego a consecuencia de un accidente en su niñez. También cuestiona qué pudo haber inspirado a un muchacho inventar algo tan adelantado a su época. El primer “código binario” del mundo.
Señala que las personas que perdemos alguno de nuestros sentidos, la vista, la audición o cualquier otro, estamos susceptibles a ser poseídos por el Diablo. ¡Miles de los que caen víctimas del diablo somos aquellos que no podemos ver o escuchar! Indica que al faltar la visión el Diablo la reemplaza con otras visiones. Añade que cuando el joven Louis Braille inventó el braille estaba poseído por demonios, quizás por el mismo Diablo.
El supuesto Pastor plantea que la celda de braille contiene seis puntos colocados en dos columnas formando un rectángulo. Un punto puede estar al relieve en cualquiera de las seis posiciones para formar sesenta-y-cuatro símbolos. Hace hincapié en los siguientes valores numéricos, 64 permutaciones, 2 filas y 6 puntos, 64 + 2 + 6 = 66. Añade el 6 de las diferentes posiciones para formar las letras y signos, y obtiene el 666. ¡El número favorito del Diablo!
El braille, según él, es “leído” moviendo la “Mano Izquierda” sobre las protuberancias, ofreciéndole al lector un mensaje escondido en forma de código, muy parecido a la Ouija (Ouija Board). El lector debe interpretar el “código secreto”. Según el supuesto Pastor, la mayoría de los “códigos” son diabólicos, son del Diablo. Pone de ejemplo “El Código Da Vinci” de Dan Brown. Cree demostrar su teoría mediante una foto de Louis Braille leyendo su lenguaje satánico con su “Mano Izquierda”.
Louis Braille leyendo su lenguaje 'satánico' con su mano izquierda
Va más allá cuando indica que pese a que cada una de las letras del braille corresponde a una de las letras del alfabeto romano, la realidad es que es algo más siniestro. El braille tiene un código escondido en sus celdas, caracteres y permutaciones, y quién sabe en realidad qué le está diciendo al ciego retardado que lo lee. Es una técnica de control mental subliminal para lavar el cerebro y condicionar a los ciegos que lo leemos. El braille es utilizado por el Diablo para reclutar más retrasados a su ejército y pasar mensajes secretos satánicos entre nosotros. Es la forma que tiene el Diablo para pasar sus órdenes sin que sean detectadas por el público en general. ¡Es el lenguaje secreto de Satanás!
Ofrece como prueba una foto de una mujer leyendo uno de los libros de Harry Potter en braille. Se refiere a ella como retardada. Según el supuesto Pastor, se puede claramente observar que está poseída por demonios. Señala que el braille es pura perversidad, tanto que las personas se están haciendo tatuajes en braille, y critica el hecho de que hay copias del Corán en braille. Así que los ciegos que sabemos braille, ¡estamos poseídos por el diablo!
Para el supuesto Pastor no solo los ciegos que leemos braille estamos poseídos por el Diablo. Todas las personas con alguna limitación física o mental está también poseída por el Diablo. ¡Hasta los zurdos!
Al leer estas expresiones hay una mezcla de sentimientos, coraje, incredulidad o simplemente, reírse de dichas ideas. Da mucho coraje, y muchas personas no podrán creer que expresiones como éstas llenas de prejuicio y discrimen salgan de la boca de una persona cuya misión es predicar el Amor de Dios, y que todos somos iguales.
El supuesto Pastor sin embargo, es uno de tantos que a través de la historia ha transformado sus prejuicios en dogma. La figura del ciego se ha presentado consistentemente, con un manto de mentiras y mitos. Todo ello producto de la ignorancia y el temor a lo que es diferente.
Gracias a la filosofía y trabajo en la National Federation of the Blind, puedo analizar las expresiones del supuesto Pastor desde otro punto de vista. Durante mis años en la Federación, he visto cómo los niños y jóvenes ciegos se benefician del braille; he tenido la oportunidad de conocer ciegos profesionales exitosos gracias al braille; y personalmente me he beneficiado con el uso del Braille. Me atrevería decir que en parte el supuesto pastor tiene razón. ¡Sí, gracias a Louis Braille los ciegos estamos poseídos, pero no por el Diablo, sino por el poder de la alfabetización.
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Sí, soy profesional. Me formé en el colegio y universidad escribiendo en ese código malévolo invocador de la oscuridad. Y no me ¡arrepiento! Y quienes van por ahí canturreando como búhos que “el braille morirá”, no saben de lo que se están perdiendo. Mis queridos bichos, como dijo un futbolista retirado por ahí… ¡El braille es sabroso!
Gracias a esos profesores que en su momento me enseñaron a leer y a escribir, estoy en donde estoy. Es más, el braille debe ser enseñado desde todos los focos sociales. Desde las escuelas hasta los buses de transporte público. No es otro lenguaje como algunos piensan, sino un sistema de comunicación y escritura en diferentes lenguas habladas. ¡Qué viva el braille!
