El técnico portugués llegó a Colombia exactamente hace 9 días y asumió la dirección técnica tricolor hace 192 horas y ya hay personas que lo critican sin haber hecho su primer microciclo o entrenamiento. Muchos de estos reproches son de personas que se dejan influenciar por las redes sociales y que además no tienen ni la más mínima idea del trayecto y experiencia que tienen el nuevo timonel del combinado nacional.
Pues les cuento, Carlos Queiroz es un entrenador con un recorrido de mucho prestigio. Ha dirigido clubes como el Real Madrid temporada 2003-2004, al Sporting de Lisboa 1994-1996 y selecciones mayores como Portugal, Emiratos Árabes e Irán, siendo esta su última casa. Además, es un estratega que sabe potenciar y llevar a los nuevos talentos del fútbol, como en su paso en la selección portuguesa sub 20, donde dirigió a jugadores de talla mundial, caso Figo.
Por otro lado, tiene un palmarés que muchos envidian, el luso quedó campeón del mundial sub 19, sub 20 y de la Eurocopa sub 20. También ganó una copa y supercopa de Portugal y en su tiempo en la casa blanca levantó una supercopa de España.
Ahora, muchos dicen que es defensivo y que acabará con lo que Pékerman nos dejó, pues les digo… ¿ustedes que harían si fueran el técnico del seleccionado iraní y enfrentaran a España? En mi lugar, hubiese hecho lo mismo que Queiroz, parquear el bus y guardar el cero.
Sin embargo, la gente en vez de indagar e informarse de quién es el nuevo capitán del barco tricolor, sigue poniéndole grises. Para los que no saben, este señor en su segundo día en el banquillo cafetero fue al Campín y se dispuso a observar el encuentro entre Santa Fe ante deportes Tolima con el fin de empaparse del balón pie colombiano.
No siendo más, los invito a que dejen trabajar al profe Carlos Queiroz. Que sea el tiempo quien le dé o no la razón a la Federación Colombiana de Fútbol (FCF). Además, piensen bien una cosa, si a él le va bien, todos felices. Entonces no tenga miedo y súbase al bus del portugués, aún hay cupos.
¡Bienvenido profesor, Carlos Queiroz!
