Comerciantes de diferentes ciudades del país responsabilizan desde ya a Duque por las cuantiosas pérdidas económicas que tendrían este fin de semana de celebración del tradicional Día de madres, por la inconveniente extradición de alias Otoniel, jefe máximo del Clan del Golfo.
Así lo manifestaron miembros de este gremio este día apesadumbrado por el arbitrario cierre de sus negocios. Y es que tan solo unas horas después de haber sido extraditado a los Estados Unidos, los hombres de Otoniel —ahora al parecer dirigidos por alias Chiquito Malo— desataron en retaliación a ese hecho un paro armado de 4 días.
Según uno de los comunicados circulantes y una oleda de terror a partir de mensajes en redes sociales y de acciones que dieron lugar a que los comerciantes, asustados, presurosos, cerrarán de inmediato sus negocios tras la quema de vehículos en algunas partes del país, como Urabá, Bajo Cauca, en Antioquia y en otras regiones a lo largo y ancho del territorio nacional donde esa organización tiene vasta influencia.
Ya los movimientos de víctimas, y algunos personajes de la política nacional, se habían opuesto a esa extradición a la que consideraron de antemano un medio para acallar la verdad. Lo que ratifican hoy al conocer el propósito del ex guerrillero y ex paramilitar de versionar sobre sus guerras y sus aliados desde 1987.
Sin embargo, ahora, tras la extradición, otras personas, entre ellas avezados politólogos, consideran que ésta puede ser una estrategia del Presidente Duque y su gobierno Uribista para incidir en el proceso electoral adverso a sus aliados políticos, alimentando una oleada de indignación, de protesta y de terror en la nación que pida a gritos finalmente su intervención con medidas draconianas de Estado de Conmoción Interior, o Estado de Sitio, como las que en El Salvador ha implementado groseramente, contraviniendo los postulados de Derechos Humanos, su presidente Nayib Bukele, que le hagan senda a la necesidad de una política de mano dura, como la que supuestamente ofrecería el candidato Federico Gutiérrez y, por tanto, desfavorezca las propuestas sociales del candidato que puntea en las encuestas, Gustavo Petro.
En el panfletario comunicado que conocimos hoy sorprende que las Autodefensas Gaitanistas de Colombia acusan la actuación del presidente Iban Duque porque según ellos “(…) sin ninguna realización seria que mostrar ante la opinión pública, pisotea los derechos de las víctimas y de la sociedad en general a saber la verdad”.
Lo cierto es que mientras comerciantes y la población civil de diferentes zonas del país zozobran víctimas del miedo, por tiroteos y hostigamientos en algunos municipios, como en Turbo, su corregimiento El Tres, desde el Gobierno Nacional consideran un logro la extradición de colombianos.
Una práctica, de genuflexión al país del norte, aún a sabiendas de que pese al convenio mutuo de que extradición de doble vía, esta es en la práctica de un solo sentido, porque desde Norteamérica no extraditan a ciudadanos norteamericanos a nuestro país aún cuando tengan procesos judiciales vigentes en Colombia, como es el caso de la joven victima, Laura Melissa Caballero, asesinada el año pasado en Cartagena al parecer por un ciudadano norteamericano que gozaría al momento de tranquila libertad en su país, donde bien le protegen.
