En el 2015 cumplimos dos años de diálogos de paz entre las FARC-EP y el gobierno de Juan Manuel Santos, de los cuales se hizo público un acuerdo en el primer, segundo y tercer punto de la agenda. El documento (en borrador) del primer punto que sale como producto de este acuerdo, fue titulado por las partes: Hacia un Nuevo Campo Colombiano: Reforma Rural Integral.
En el borrador se hace explícito un diseño que no ha sido (y posiblemente no será) conciliado entre las partes y es que para las FARC-EP una hoja de ruta como la que se planteó la Mesa de Conversaciones en el punto de Política de Desarrollo Agrario Integral con Enfoque Territorial debe tener como principio fundamental el derecho a la soberanía alimentaria, en cambio, para el gobierno de Juan Manuel Santos la base del documento es la construcción de un sistema de seguridad alimentaria, alegando que eso es lo acordado en el Acuerdo General para la Terminación del Conflicto, lo cual no es más que apelar a las leguleyadas-colombianadas típicas cuando no existen argumentos de peso para negarse.
Este documento, se divide en 3 partes que son:
1. Acceso y uso. Tierras improductivas. Formalización de la Propiedad. Frontera Agrícola y Protección de Zonas de Reserva Campesina.
2. Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial.
3. Planes Nacionales para la Reforma Rural Integral.
Por razones de espacio me enfocare en el tercer punto del documento que son los Planes Nacionales para la Reforma Rural Integral. Estos planes son 8 que son:
• Plan Nacional de Riego y Drenaje.
• Plan Nacional de Electrificación Rural.
• Plan Nacional de Conectividad Rural.
• Plan Nacional de Fomento a la Economía Solidaria y Cooperativa Rural.
• Plan Nacional de Asistencia Integral Técnica, Tecnológica y de Impulso a la Investigación
• Plan para Aportar y Consolidar la Generación de Ingresos de la Economía Campesina, Familiar y Comunitaria y de los Medianos Productores con Menores Ingresos.
• Plan Nacional para la Promoción de la Comercialización de la Producción de la Economía Campesina, Familiar y Comunitaria.
• Plan Progresivo de Protección Social y de Garantía de los Derechos de los Trabajadores Rurales.
Estos planes nacionales se coordinaran a través de un Consejo Nacional de Alimentación y Nutrición que tendrá como objetivo fundamental consolidar gracias a los mismos un sistema nacional de seguridad alimentaria que permita desarrollar, como insiste constantemente las FARC-EP, a partir de la movilización social y popular, el derecho a la soberanía alimentaria del pueblo colombiano, ya que tiene como objetivos específicos: “el incremento progresivo de la producción de alimentos, la generación de ingresos, y en general la creación de condiciones de bienestar mediante los planes nacionales de acceso a tierras, infraestructura, riego, vivienda y agua potable, asistencia técnica y capacitación, mercadeo, crédito, la promoción de formas asociativas basadas en la solidaridad y la cooperación y demás planes establecidos en el presente acuerdo” con el fin de que en una fase de transición de 10 años desde el inicio de los planes se erradique la pobreza extrema en el campo y se reduzca a la mitad todas las dimensiones de la pobreza rural disminuyendo drásticamente la desigualdad gracias a una articulación enriquecedora entre el campo y la ciudad en función de las comunidades.
Es importante resaltar que lo acordado son las bases que necesitan las comunidades rurales para marchar de manera autónoma hacia su propia Reforma Rural Integral, ya que en las bases de lo acordado se hace explicito, que las comunidades rurales son las protagonistas de la transformación estructural del campo colombiano para el bienestar de la población rural y la construcción de una paz estable y duradera en el nuevo país que queremos todas y todos.