La reincorporación de las personas extranjeras, especialmente las provenientes de Venezuela que hicieron parte de las filas guerrilleras, aún está pendiente de resolver. Después de seis años de la firma del Acuerdo, los trámites para que estas personas puedan estar en el país de manera legal y sin inconvenientes, no se han realizado.
Hace unos años, al comenzar el proceso de reincorporación, fue todo un descubrimiento encontrar extranjeros que hicieron parte de las filas de la Farc. Había guerrilleros de distintos países latinoamericanos y hasta dos europeos como la holandesa Tanjia Nijmeijer, el caso más conocido. Sin embargo, poco se habla de los exguerrilleros venezolanos que hicieron parte del proceso.
Entre los años 2017 y 2018, se habló primero de las visas de paz y luego, de las cédulas de extranjería. Sin embargo, este proceso trajo como resultado trámites de pasaportes, los cuales salieron con una duración de tres años, es decir, que ya desde el 2020 estaban próximos a caducar. Posteriormente, Migración Colombia incluyó un nuevo trámite a través del Estatuto de Protección Temporal que, si bien es cierto, ha normalizado la situación de muchas personas, también ha tenido desventajas porque se ha convertido en el documento más solicitado por los venezolanos que desean desarrollar cualquier actividad legal en Colombia, por ejemplo, la formación académica.
Otra situación particular que han vivido los exguerrilleros de nacionalidad venezolana, es en el contexto educativo al que tiene derecho la población en proceso de reincorporación. En 2023 son centenares las personas firmantes de paz graduadas, pero no sucede así cuando se trata de los excombatientes venezolanos, ya que para ello es necesario contar con el PPT.
Dairis Fernández, firmante del Acuerdo de Paz, relata lo siguiente: “Primero, nos dieron un salvoconducto. Después, un pasaporte que está que se vence porque nos los dieron hace tres años. Yo hice el proceso de migración, pero todavía no me han entregado el permiso”. Líderes del espacio afirman que la reincorporación no ha cumplido con las expectativas y solo queda la esperanza que el nuevo Gobierno del presidente Gustavo Petro pueda recuperar los años perdidos, que pueden reflejarse en las distintas problemáticas vividas a diario por los firmantes de paz.