El papa Francisco se convirtió en el primer líder de la Iglesia Católica en visitar la Península Arábiga, cuna del islam. Francisco llegó ayer a los Emiratos Árabes Unidos para mejorar la relación que tiene con el mundo musulmán. Además, el Vaticano planea que, con la visita del papa, se abra la posibilidad de que se construyan más iglesias católicas en ese país en donde
El Gobierno de los Emiratos ha impulsado varias iniciativas para promover el respeto a todas las religiones, pero mantiene unas estrictas normas de juego alrededor del islam. Por ejemplo, tiene un Ministerio de Tolerancia que le ha dado libertad religiosa a algunas minorías, pero al mismo tiempo considera ilegal dejar el islam por otra religión y condena con pena de muerte la blasfemia. Aunque muchos se preguntan cuál es la posición del papa ante esta situación, por el momento, Francisco no ha tocado el tema.
De lo que sí habló el papa fue de la guerra en Yemen pues pidió que todas las partes involucradas en el conflicto trabajen por el bien de la población, que está sufriendo. Este conflicto, que lleva cuatro años, ha provocado una fuerte crisis humanitaria y los Emiratos Árabes Unidos es uno de los países que ha apoyado a Arabia Saudita a combatir a los rebeldes yemeníes.